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Golpean y asfixian a periodista durante un robo

Que le hayan robado a un periodista y escritor platense en su departamento de Barrio Norte ya es de por sí una noticia, pero que además lo hayan asfixiado, maniatado y golpeado para que entregara sus pertenencias es todavía más grave, y que los asaltantes hayan ingresado por el balcón tras subir bajo la modalidad de “hombre araña” hasta el segundo piso es llamativo. Pero todo eso sucedió  durante la mañana de ayer, informaron fuentes policiales y la propia víctima.

Hipólito Sanzone, reconocido profesional de nuestra ciudad, se encontraba durmiendo en su inmueble ubicado en 35 entre 4 y 5. Por suerte, según sus propias palabras, estaba solo, ya que su pareja no había regresado de su consultorio de psicología y sus hijas gemelas se encontraban con su madre. Entonces, “me despertó la luz de una linterna y tres se me abalanzaron a golpes”, inició la charla. Uno de los ladrones (los cuales eran todos mayores) comenzó a pegarle, tanto con los puños como con un objeto contundente: “no sé si era un arma, una linterna o qué. Era algo más duro”. Aclaró que no sólo lo maniataron, sino que controlaban constantemente lo que hacía; “el departamento es chico, por lo que tampoco me podía mover mucho. Sí me decían que nos mirara a los ojos”.

Sin límite

Los cacos querían dinero y para obtenerlo no se pusieron límites; así fue que, más allá de la golpiza, asfixiaron a la víctima, para que revelara dónde tenía los ahorros. “Una vez que les dije dónde tenía el poco efectivo, dejaron de pegarme y ahogarme”, puntualizó. Entre los elementos sustraídos, enumeró “el televisor del living, otra más chico del cuarto y la computadora que uso para trabajar, además de unos siete mil pesos”. Sin embargo, agradeció que no hayan visto al celular, que se estaba cargando en una repisa, “ya que es otra herramienta de laburo”.

Con la plata y los elementos de valor asegurados, llegó el momento del final de la historia: “todo habrá tardado unos 10 minutos. Por lo que alcancé a ver a través de la venda que me pusieron (también tenía un gorro hasta en la boca), vi que se fueron por el balcón. En la vereda, aparentemente había otro u otros manejando las sogas con las que bajaron las cosas robadas, porque escuché cómo se deslizaban”.

Al estar solo, llamó al 911 y agentes del CPC La Plata y de la comisaría Segunda se hicieron presentes. “Vinieron rápido y me trataron bien””, detalló. Y añadió que “gracias a Dios estaba sólo yo; si hubiesen estado mis seres queridos no sé qué hubiese pasado. Además, no vieron mi billetera con el DNI, el registro y la tarjeta de débito”. Por último, comentó que “tengo la cara un poco marcada, pero la terminé sacando barata, aunque me quedó una sensación horrible. Me tocó a mí, y le pudo haber tocado a cualquiera”.

La UFI 9 de Autores Ignorados caratuló la causa como “robo calificado y lesiones”.