Herencia S: el presupuesto de 2015 cerró al rojo vivo

Un informe estadístico reveló que la administración de Daniel Scioli pasó de un superávit financiero de 800 millones de pesos en 2014 a un déficit de 21.470 millones de pesos en 2015

El exgobernador Daniel Scioli sumó un sospechoso manejo de las cuentas públicas, durante el año pasado, a la grave denuncia de la legisladora Elisa Carrió, quien lo acusó de comandar una asociación ilícita para defraudar al Estado en sumas millonarias. 

De acuerdo a la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP), la Provincia de Buenos Aires cerró 2015 con “una desmejora significativa en los resultados fiscales” que contrasta con los números de 2014, a tal punto que de un año a otro se pasó de un superávit financiero de 800 millones de pesos a un déficit de 21.470 millones.

Las comparaciones en los resultados económicos primario y financiero muestran sin excepciones un deterioro en el último año de gestión de Daniel Scioli como gobernador bonaerense, destacó la entidad en su último informe de ejecución del presupuesto de la Provincia de Buenos Aires.

“Durante el año 2015 se observó una desmejora significativa en los resultados fiscales con respecto a 2014”, indicó la ASAP, en referencia a que “el resultado económico registró un déficit de 15.820 millones de pesos”, cuando en 2014 había sido superavitario en 3.353 millones. 

A su vez, “los resultados primario y financiero fueron deficitarios en 11.545 millones de pesos (contra el superávit de 7.530 millones) y en 21.470 millones de pesos (contra el superávit de $800 millones), respectivamente”, añadió. A su vez, destacó que “tanto el resultado primario como el financiero pasaron de representar superávits de 3,7 y 0,4 por ciento de los recursos totales percibidos en el año 2014, respectivamente, a ser deficitarios en 4,2 y 7,8 por ciento durante 2015”.

“Por su parte, el resultado económico pasó de un superávit de 1,7 por ciento de los recursos totales en 2014 a un déficit de 5,8 por ciento de dichos recursos en 2015”.

En ese sentido, precisó que mientras los gastos tuvieron un crecimiento interanual del 46,3 por ciento, los recursos lo hicieron en un 35,1 por ciento. El debate que se viene es saber dónde fue a parar ese dinero en un contexto minado de sospechas en las que se escuchan palabras como negociados, testaferros, desvío de fondos y corrupción.