Quita de pensiones: desmienten al Gobierno y crece la polémica

La polémica decisión del Gobierno nacional de modificar el sistema de beneficios sociales por discapacidad y, consecuentemente, sacarle las pensiones a más de 70.000 personas continúa dando de qué hablar en los distintos sectores sociales. Hace algunos días, la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley,  en un intento de desligar responsabilidades al Ejecutivo nacional, declaró que “en 2015 se dieron de baja 168.000 pensiones con los mismos criterios que usamos hoy”. 

Sin embargo, desde el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) se publicaron números que muestran otra realidad: desde junio de 2014 a abril de 2015 hubo más de 145.000 suspensiones. La proyección da cuenta de que a los 12 meses se estimarían unas 160.000 bajas, un dato similar al que utilizó Stanley. El error de la titular de la cartera de Desarrollo fue no mencionar que la amplia mayoría de estos ceses corresponde a jubilaciones, fallecimientos, renuncias voluntarias y obtención de empleos.

Datos del CEPA detallan que de las bajas de pensiones por invalidez durante dicho período el 62% corresponde a jubilaciones; el 18%, a fallecimientos; el 6%, a renuncias voluntarias; y otro 6%, a la obtención de un empleo.

Quintana, detrás de la decisión

Además de Stanley, otro funcionario del Gobierno nacional fuertemente criticado por este tema es el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, quien tendría allegados e influencias dentro del área de Desarrollo Social. Luego de que propusiera recortes en Anses, PAMI y el área de pensiones, Quintana habría sido quien, a través del llamado “Gabinete Social”, habría impulsado la quita de las pensiones de discapacidad. 

Quintana, actualmente, trabaja con Carlos Badino, el funcionario de la cartera de Stanley que quiso implementar la polémica medida y además es cercano a Matías Kelly, secretario de Economía Social que tiene bajo sus arcas los planes Trabajar.