Entrevista a Horacio González, exdirector de la Biblioteca Nacional

“Macri lleva adelante un modelo antisindical”

Así se expresó ante este medio el exdirector de la Biblioteca Nacional, Horacio González. Además, el intelectual aseguró que si el oficialismo gana en octubre, la Argentina “dejará de ser una República soberana”, y señaló que el de Cambiemos “es un gobierno injusto y deshumanizado”

Sociólogo, ensayista, director de la Biblioteca Nacional entre 2005 y 2015, y una de las voces intelectuales más reconocidas de la Argentina, Horacio González ha sabido ganarse el respeto de propios y extraños con escritos que han dejado enseñanzas a varias generaciones.

En diálogo con diario Hoy, González efectuó un pormenorizado análisis del gobierno de Mauricio Macri, al que catalogó como “lo más rancio de la derecha nacional”. También trazó un crudo escenario social, al advertir que el Ejecutivo lleva adelante un modelo que va en contra de los trabajadores y que puede traer “consecuencias inesperadas” para el país.

—¿Cómo ve la realidad del país bajo el gobierno de Cambiemos?

—Las novedades que introdujo Mauricio Macri son muchas, entre ellas el desmantelamiento de ámbitos laborales y la falta de reglamentación para el trabajo, para la vida pública e incluso para la circulación. Estos cambios son de tal magnitud que incluso no sé si alcanzan la expresión neoliberalismo. Sin dudas, para comprender todo esto también ayuda conocer el hecho de que hay una corriente mundial en la cual el Gobierno se ha inscrito. Vino a trabajar para unos intereses específicos y los lleva adelante muy bien, pero no son los del pueblo.         

—Con una economía cambiante, ¿cuál es el escenario que se le presenta a la Argentina?  

—Hoy vemos un cuadro económico en el que el no despegue de inversiones y las críticas a todas las políticas neoliberales del macrismo lo ponen en situaciones muy comprometidas con las tasas de interés y con los tipos de cambio. Esto lleva al Gobierno a cuestiones objetables, como adquirir una deuda a 100 años o hacer un convenio con una empresa de telecomunicaciones que limita la actividad de Arsat. Ahora anuncian novedades que son muy cuestionables para el mundo laboral, anuncian represión por cualquier pretexto, presentan la baja de las jubilaciones como si fuera algo favorable para el jubilado, y está comprobado que no es así.

—Hablando de los trabajadores, ¿qué piensa de la actitud que tiene el Gobierno hacia el sindicalismo?

—No hay dudas para nadie de que Macri lleva adelante un modelo antisindical. Está haciendo lo contrario a lo que dijo en campaña. Ahora es un poco al revés y está diciendo que va a flexibilizar el trabajo y bajar el costo laboral. De todas maneras, ya se anima a anunciar un futuro en el que la vida laboral será diferente a como fue durante casi toda la historia argentina del siglo XX, desde Carlos Pellegrini y Joaquín V. González hasta Yrigoyen y Perón, quienes respetaron siempre el alto nivel de vida sindical argentina. Ellos van por todo, y el sindicalismo entra dentro de ese todo.

—¿Cuál sería entonces el proyecto sindical de Macri?

—El proyecto de Macri es un país sin sindicatos. En la tradición argentina siempre hubo un intento de conciliar intereses estatales, empresariales y sindicales que el peronismo llevó a un plano de mayor exigencia, el “fifty fifty”. Uno podría decir que es poco: un 51% para los sindicatos, un poco más de distribución para los trabajadores, discusiones de larga data que todo viejo argentino recuerda. Hoy no existen más esas discusiones: el proyecto de Macri es tener sindicatos que estén totalmente vaciados de su significación sindical.

—¿Qué sucedería entonces si el oficialismo ganara las elecciones legislativas?

—Si triunfa el macrismo, a largo plazo se abrirá un ciclo muy difícil para la Argentina, en el cual se dejará de ser República soberana. Esta es la conclusión mas grave, ya que el macrismo se las ingenió para ser un gobierno injusto, discrecional y sin ninguna causa histórica. Eso es un paso adelantado a endeudar al país, no solo económicamente sino a endeudarlo con respecto a su propia historia. El de Cambiemos básicamente es un gobierno injusto y deshumanizado, que si ganara en octubre agrandaría la brecha entre ricos y pobres en nuestro país.

—¿Qué escenario se abre con la presentación de Cristina Kirchner como precandidata?

—Una de las tantas cosas que interesan del presente es qué es el peronismo o qué es ser peronista. El Justicialismo cumplió un gran ciclo y está viendo cuál es su camino en la historia futura. En cuanto a los comicios próximos, los considero cruciales. No se trata de una simple elección de medio término, sino que cambia mucho toda esta discusión si Cristina hace una buena elección en la Provincia o no.

—¿Si gana Cristina se abre otro panorama en la política nacional?

—Con un triunfo de Cristina se podrán discutir las políticas deconstructivas que tiene Macri con respecto al aparato estatal, el empleo público, el trabajo de los obreros en las empresas privadas, las inversiones, la vida científico-técnica, la cuestión universitaria y educativa. Todos aspectos que pueden detener el modo salvaje en que se está produciendo este ajuste y desmantelamiento de las conquistas sociales.

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