El técnico de Gimnasia atraviesa el confinamiento en su domicilio de Bella Vista, acompañado por un amigo y su sobrino Jhony Espósito. Además, el Diez continúa su tratamiento médico para mejorar la parte física
17/05/2020 - 00:00hs
El cese de las actividades deportivas en Argentina ha mantenido en vilo a todos sus protagonistas, a la espera de conocer una fecha definida de regreso. El parate que impuso la pandemia por el coronavirus no aparenta, en principio, abandonar Sudamérica en el corto plazo.
Sin embargo, Diego Armando Maradona aprovecha esta pausa para concentrarse en avanzar en su tratamiento médico físico. Cabe recordar que el DT del Lobo se recupera de una operación en su rodilla derecha. Le costó volver a caminar y desde julio del 2019 realiza kinesiología. En esta cuarentena recibe la visita de sus médicos, el doctor Leopoldo Luque y el kinesiólogo Nicolás Taffarel. Realiza trabajos físicos con el objetivo de ponerse a punto para cuando regrese el fútbol argentino y pueda volver a ponerse el buzo de entrenador de Gimnasia y Esgrima La Plata.
El ex capitán y entrenador de la Selección Argentina se encuentra acompañado de su sobrino Jhony Espósito y de su amigo Charly. Se levantan a media mañana, desayunan y luego realiza actividad física. Diego tiene una bicicleta fija a la que concurre a diario para no perder movilidad y mantenerse activo durante el aislamiento preventivo, social y obligatorio.
Tiene reuniones diarias con su ayudante de campo, Sebastián “Gallego” Méndez, en las que diagraman cada entrenamiento del plantel de Gimnasia; además, proyectan trabajos para el regreso a las prácticas en Estancia Chica. Se están preparando, por eso analizan con qué jugadores van a contar, con quiénes no y las posibles incorporaciones en el próximo mercado de pases.
Maradona ya pidió un lateral para sumar al equipo y el nombre que acercó a la dirigencia es el de Gastón Díaz. El marcador de punta de treinta y dos años tuvo un paso por la institución Mens Sana en entre 2013 y 2014 y dejó un buen recuerdo en aquel equipo dirigido por Pedro Troglio, donde jugó treinta partidos, marcó dos goles y asistió en siete oportunidades.
Con ganas de volver a estar al mando de un entrenamiento y con esperanzas de que la pandemia por coronavirus deje de azotar al mundo, Diego Maradona se queda en casa para estar más fuerte que nunca, cuando se pueda regresar.