06/08/2014 - 03:00hs
Mientras la dirigencia cerró el pase millonario al Sporting de Lisboa, desde la secretaría de fútbol mandaron al psicólogo al lateral debido a un difícil momento familiar que lo podría llevar a declarar fuera de lugar
Desde hace dos semanas, la millonaria venta de Jonathan Silva al Sporting de Lisboa es el principal comentario en la órbita deportiva de Estudiantes por los importantes dividendos que le quedarán tanto al club como al defensor surgido en el barrio de Tolosa. El futbolista tiene las horas contadas en nuestra ciudad.
Sin embargo, aún cuando se conoció ayer que la operación se había cerrado y que el jugador deberá viajar entre hoy y mañana a Portugal para someterse a la revisación médica, desde la secretaría de prensa de Estudiantes se implementó una maniobra disuasiva que buscó sacar al protagonista de la esfera pública.
Tanto es así que se convocó a una conferencia de prensa del defensor central Jonathan Schunke, quien no está habilitado para jugar en el debut del campeonato ante Arsenal del próximo lunes a las 18, por lo que su testimonio quedó desactualizado con la realidad deportiva e institucional del Pincha.
Cuando todos esperaban que el propio Jony Silva dejase su parecer sobre su salida al exterior y pudiese despedirse públicamente de los hinchas de Estudiantes, un sugestivo silencio invadió los movimientos del jugador. ¿Qué pasó en el medio?
De acuerdo a lo expresado por integrantes del cuerpo técnico. Silva atraviesa un complejo momento familiar, ya que sus padres se acaban de separar y el joven se muestra muy nervioso.
Silva, quien vive en el barrio El Churrasco de La Plata, recibió asistencia psicológica para controlar ciertas reacciones que tenían en la cancha y en los entrenamientos, y que llevaron al equipo a quedarse con un jugador menos en los partidos contra Arsenal (torneo Inicial 2013) y Lanús (torneo Final 2014).
Agustín Alayes habría sido el responsable de dar la orden de “cuidar a Silva” recomendando el tratamiento con el profesional que lo venía trabajando en los últimos meses y que había encontrado la forma de que el defensor no reciba tantas tarjetas amarillas.
Hoy, una semana después de haber llegado a La Plata, el club decidió presentar a Ezequiel Cerutti, quien recién sobre el cierre de la jornada, firmó su vínculo con la institución de calle 53.
Jonathan Silva, mientras tanto, se irá del Pincha silbando bajito…
Es inminente la venta de Correa
Finalmente ayer, el vicepresidente Oscar Cassata avanzó con firmeza en la negociación para bajarle el martillo a Joaquín Correa, por quien el club pretende ejecutar dos operaciones en una. ¿Cómo es esto?
Al parecer, Cassata aceptó bajar las pretensiones por el Tucumano (la semana pasada se habían pedido 10 millones de dólares) a cambio de lograr una cesión inmediata del préstamo del jugador que le permitirá al Pincha retener al atacante por seis meses.
Concretamente, el grupo inversor que interviene en la operación y que tiene apalabrada la compra de la totalidad del pase de Correa hizo una contraoferta cercana a los 8 millones de dólares, pero a cambio aceptó que los derechos federativos del futbolista (la ficha del jugador) permanezcan en el club hasta diciembre.
De esta manera, Correa será vendido ahora, y al mismo tiempo será cedido a préstamo al mismo club en el que está jugando para seguir defendiendo la camiseta del Pincha por un tiempo más.
No llega nadie y podría irse Olivera
De manera simultánea a las transferencias de Silva y Correa, en Estudiantes aseguran que no se va a incorporar ningún jugador más para reforzar el plantel de cara al segundo semestre del 2014.
Mañana cierra el libro de pases y ante la inmejorable posibilidad que se le presentó al club de retener un tiempo más a Joaquín Correa, se confirmó que no se harán más incorporaciones.
En tanto se le buscará dar salida a Juan Manuel Olivera al fútbol uruguayo, ya que además de ocupar un cupo de extranjeros, no será tenido en cuenta por Pellegrino.