Emociones encontradas en los minutos finales

Más allá del aliento durante todo el partido, los hinchas de Gimnasia comenzaron a manifestar su descontento en la última parte del juego, cuando desde algunos sectores del estadio empezaron a cantar contra los jugadores porque se avecinaba un nuevo clásico sin victoria.

Desde las plateas, tanto la techada como la Néstor Basile, se escucharon las primeras voces de los simpatizantes Triperos, que no pueden festejar desde el 2010. Tan es así que  empezaron a pedir “más huevo” para la mayoría de los futbolistas, lo que generó emociones encontradas en varios de los presentes, por lo que algunas peleas y discusiones pasaron a primer plano cuando apenas quedaban diez minutos de partido.

Asimismo, la expulsión de Omar Alderete provocó cierta bronca en la gente, que despidió con tibios aplausos y muchos insultos al defensor paraguayo, que no había tenido un mal desempeño en el encuentro.

Una vez que Diego Abal pitó el final, hubo dos veredictos para Gimnasia: por un lado estuvieron quienes aplaudieron a los jugadores, mientras que otros recurrieron a las malas palabras con la impotencia de no haber podido ganar el clásico.

Lo mismo se pudo percibir en la desconcentración del estadio Juan Carmelo Zerillo, cuando la gente del Lobo se fue por la avenida del Bosque, la calle 60 y otros trayectos analizando el compromiso, pero principalmente masticando cierto disgusto.