Se define el futuro deportivo más allá del interinato de Leandro Benítez. Entre la línea del fútbol moderno y el ADN del Pincha, aparecieron los nombres de Juan Ignacio Brown, Roberto Trotta, Juan Azconzábal, Martín Palermo, Fernando Ortiz y Hermes Desio
En menor medida de lo que significó la salida hace casi un año de Lucas Nardi, la reciente cesantía de Lucas Bernardi caló hondo en Estudiantes. Tanto es así que se respira un clima espeso en el Country de City Bell, donde Diego Ronderos y Leonardo Mansilla consumen las horas entre cigarrillos y llamados, y Agustín Alayes reflexiona sobre los pasos a seguir.
Sin llegar a estar arrepentido, el presidente Sebastián Verón entiende que un acierto en la elección del próximo entrenador sería ponerle el broche de oro a una gestión que tiene dos años y medio por delante, en donde además terminar el estadio, se apuntará a conseguir resultados deportivos que acompañen el entusiasmo de los hinchas. Para esto, siempre hay un as debajo de la manga.
Si bien en la preferencia de la dirigencia picó en punta Sebastián Becacece, en la intención de buscar un término medio entre el fútbol moderno y la historia del club, ayer se tiraron sobre la mesa de análisis otras opciones. Es allí donde entraron en escena Martín Palermo, Juan Manuel Azconzábal, Roberto Trotta, Fernando Ortiz y Hermes Desio. Este último tuvo un paso muy importante durante cuatro años en las divisiones inferiores de Estudiantes, y si bien no surgió del club, hizo fuerte el sentido de pertenencia con la institución.
El Tanto Ortiz está en el Sportivo Luqueño de Paraguay, y ya había sondeado por el Pincha cuando se produjo la salida de Nelson Vivas.
Ortiz tampoco surgió en el Pincha, pero se consagró campeón en el 2006 y los hinchas tendrían más paciencia con él.
Roberto Trotta, Martín Palermo o Juan Manuel Azconzábal crecieron jugando en el estadio de 1 y 57, y dos de ellos llegaron a vivir en el demo. Tanto el Vasco como el Loco formaron parte del equipo que ganó el torneo de la B Nacional en 1995 y en el caso de Trotta, fue capitán y referente en los primeros años de la década del ’90, antes de pasar a Vélez por pedido de Eduardo Manera,.
El último caso que se empezó a analizar anoche a última hora es el de Juan Ignacio Brown, quien acaba de consagrarse campeón en Arabia Saudita dirigiendo al All Hilal.
El hijo del Tata tiene en su cuerpo técnico a Juan Cruz Calabrese y en las filas de su equipo está Ezequiel Cerutti, quien también tuvo un paso por Estudiantes.
Todos ellos compiten dentro de la consideración de los integrantes de la secretaría de fútbol, que cuentan con un receso largo por delante para enderezar el rumbo deportivo del club.