El Tula, el mejor hincha del mundo que se cruzó con el diario Hoy
Fue una de las postales de la hinchada argentina en el Mundial de Argentina 78, México 86, y también en Italia 90.
Sebastián Gubia, runner de nuestra ciudad, viajó a Bangladesh para cumplir con su promesa tras la consagración de la Albiceleste en el Mundial de Catar. Tripero de ley, aprovechó la ocasión para sumar hinchas en territorio asiático.
01/03/2023 - 00:00hs
La consagración de la Selección Argentina en el Mundial de Catar nos sigue regalando historias que quedarán para la eternidad. Sebastián Gubia, reconocido runner de la ciudad de La Plata, viajó a Bangladesh para cumplir con su promesa tras el logro de la Albiceleste. Tripero de ley, aprovechó la ocasión para sumar hinchas en territorio asiático. En exclusiva para diario Hoy, el deportista platense contó sus sensaciones sobre su estadía en Daca, su misión solidaria y el amor incondicional de los bangladesíes por nuestro país.
“Soy fanático de Gimnasia, pero cuando la Selección perdió el primer partido ante Arabia Saudita, hice la promesa de que si ganábamos el Mundial me subía al avión para correr en Bangladesh. Y con mi esposa también queríamos retribuirles todo el aliento que nos dieron durante la Copa del Mundo. Una de las maneras que se nos ocurrió fue la donación de inhaladores para el asma, ya que ellos tienen serios problemas de respiración”, comentó Gubia.
La versión local de Muchachos interpretada por un grupo de fans fue el telón de fondo de la reapertura de la embajada argentina en Daca, capital de Bangladesh. También hubo yerba mate, alfajores y dulce de leche, algunos de los productos que llevaron las empresas que acompañaron al canciller Santiago Cafiero en la misión comercial. El runner platense fue parte del evento y aprovechó para desplegar una bandera con la imagen de Diego Maradona como técnico de Gimnasia (la génesis del amor bangladesí con la Albiceleste tiene que ver con el Mundial 1986 y el triunfo contra los ingleses).
Consultado sobre su estadía en Daca, Gubia detalló: “También hicimos una colecta a través de Corredores Argentinos. Fuimos pactando diferentes encuentros mediante las redes. No son carreras oficiales, pero sí se organizaron entre los distintos grupos de running que existen acá. Lo loco fue que se coordinaron varios encuentros, pese a que suelen correr solamente los días viernes porque es como su feriado. Fue un viaje totalmente mágico. A cada evento que fuimos nos recibieron de maravilla, nos pedían fotos y cada vez que terminaba una carrera nos otorgaban plaquetas, condecoraciones y flores”.
Por último, el hincha del Lobo contó una de las tantas anécdotas que quedarán para toda su vida: “Nos perdieron una valija en una de las escalas que hicimos desde la India a Bangladesh. Buscando el ticket, me meten a una cola larga y yo tenía la bandera de Maradona. Cuando vieron que era la del Diego, avanzamos automáticamente cuatro casilleros en la cola y a partir de ahí es el Pasaporte Maradona. Ese pasaporte de Diego es el que estamos renovando con Messi”.