Caso Villa: La fiscal González pedirá la detención del jugador
Se complica la causa iniciada el pasado 13 de mayo contra el jugador de Boca.
A horas del clásico platense, Rodrigo Rey se mostró a corazón abierto sobre su problema en el habla. Ante la consulta de diario Hoy, el arquero de Gimnasia prefirió no polemizar y optó por un mensaje constructivo. Una historia de vida que representa a miles de personas
08/06/2022 - 00:00hs
Estudiantes y Gimnasia son protagonistas de un clásico que se vive con mucha carga emocional. Jugadores e hinchas se mimetizan en ese estado de adrenalina pura de donde a veces resultan momentos amargos para el deporte. Una vez finalizado el último derbi platense, Rodrigo Rey hizo algunos gestos a la tribuna albirroja que enfurecieron a los futbolistas del León. Tumulto, empujones, insultos entre ambos planteles.
El tema no pasó a mayores, pero todo tenía una explicación: el arquero del Lobo acusó que los gritos recibidos desde la popular eran sobre un problema que arrastra desde la niñez. Se trata de un trastorno en el habla y por eso en las últimas horas brindó una entrevista donde contó cómo fueron sus vivencias de chico y en gran parte de su vida sobre esta dificultad con la que convive.
Ante el mensaje de diario Hoy, Rey prefirió no polemizar y optó por un comentario constructivo: “Ojalá que de todo este lío haya salido algo positivo para mucha gente”. Tal como lo explicó el propio jugador, la tartamudez o disfluencia es un trastorno del habla que conlleva problemas frecuentes y considerables de fluidez normal y de continuidad del habla. Las personas que tartamudean saben lo que quieren decir, pero tienen dificultades para decirlo.
A sus 31 años, horas después del empate en el estadio Jorge Luis Hirschi, Rodrigo decidió por primera vez dar una nota sobre el tema y visibilizar esta problemática que atraviesan miles de personas: “El tema del habla lo traigo desde chico y convivo con esto día a día. Es una disfluencia, que algunos días está y otros no, lo principal es que nunca me frenó a nada. Conocí gente que se frena por estas cosas pero no vale la pena”.
“Cuando era chico me molestaba y me calentaba conmigo mismo. Ya de grande dije Ya está. La última vez que fui a un fonoaudiólogo, estaba en Newell’s. Más que un tratamiento era una terapia de grupo y comprendí que no hay que luchar contra esto. No tengo que luchar contra lo que tengo como que no lo quiero, es mío y lo tengo que querer, y sobre todo me tengo que querer a mí”, concluyó el oriundo de Las Parejas en diálogo con TyC Sports.
La situación escaló a nivel nacional y en el inicio de la semana un ministro de Alberto Fernández llamó al arquero para hablar sobre lo sucedido. Fue Wado de Pedro, ministro de Interior de la Nación, quien comunicó que charló con el jugador: “Hablé con Rodrigo Rey, arquero de Gimnasia, sobre lo ocurrido el domingo. Coincido en que estas actitudes no suman como sociedad ni a nuestro fútbol. Quiero destacar su entereza ante la agresión. Cada vez son más los que levantan su voz contra la intolerancia”. Cabe recordar que el funcionario sufre una dificultad similar.
Dejando de lado las acusaciones entre hinchadas, el caso Rey es esperanzador para miles de personas. La autosuperación como voluntad de poder. Y, por supuesto, debe ser un llamado a la reflexión para toda la sociedad.