09/11/2013 - 09:32hs
El entrenador que sumó diez refuerzos en el mercado de pases del 2011 volverá a enfrentar a los hinchas de Estudiantes en el estadio Ciudad de La Plata. ¿Indiferencia o repudio?
Tras protagonizar una de las decisiones más controvertidas en la historia contemporánea de Estudiantes, Miguel Angel Russo volverá esta tarde a La Plata y se enfrentará a los mismos hinchas que en noviembre del 2011 pidieron su salida del club a los gritos en Mendoza, cuando el Pincha cayó ante Godoy Cruz.
Miguelito, referente histórico del equipo campeón de 1982 y 1983, no pudo repetir su éxito como entrenador albirrojo cuando le tocó dirigir al equipo en Primera división.
En su primera etapa como entrenador, en el torneo Apertura ´95, apenas se sostuvo en el cargo por once partidos, tras haber sido destituido por falta de resultados.
Si bien previamente había conformado un equipo competitivo que logró ascender junto a Eduardo Manera en nueve meses de la B Nacional, cada vez que tuvo que dirigir a Estudiantes en Primera falló.
La historia se repitió a mediados del 2011, cuando el gobierno de Filipas y Malaspina entendió que debía dar un golpe de efecto tras el frustrado paso de Eduardo Berisso.
Allí se fue a buscar a Russo, que desde su salida en 1995 dividió las aguas en el Pincha y se contrataron diez jugadores, además de recuperar a Diego Galván y Damián Albil que estaban a préstamo en otras instituciones.
Aquella determinación tuvo consecuencias inmediatas en la economía del club, con secuelas que todavía se siguen padeciendo.
El equipo repatrió a Mauro Boselli con un contrato europeo que se acercaba a los 150.000 dólares por mes y repatrió a futbolistas como Mariano González (el único sobreviviente de la fiesta), José Luis Fernández, Justo Villar y Chistian Cellay.
También se apostó a lo que podrían dar los colombianos Juan Guillermo Carachito Domínguez, Carlos Carbonero (acercados por un empresario amigo del técnico de apellido Granero) y Duvan Zapata, como así también el Rayo Mauro Fernández, de sobrados pergaminos en el torneo Argentino A.
Otro futbolista del que se esperaba mucho y que completó aquel despilfarro fue Facundo Coria, quien hoy es suplente en Argentinos Juniors y nunca se amoldó a Estudiantes.
Aquel equipo de Russo, que en su segunda etapa como entrenador en el club estuvo sólo sin formar dupla técnica como en la primera, quedó rápidamente eliminado de la Copa Sudamericana ante Arsenal y en menos de diez fechas quedó totalmente relegado en el torneo local.
Como dijo siempre Russo, el tiempo pone las cosas en su lugar: hoy el hincha de Estudiantes apelará la memoria para definir de qué forma recibirán al entrenador, que como jugador dejó un gran recuerdo, pero que en el banco de suplente tropezó dos veces con la misma piedra.
González, el único sobreviviente
De los diez jugadores que se sumaron a Estudiantes en el mercado de pases del 2011, sólo Mariano González sigue siendo parte del equipo.
De hecho, se espera que el tandilense ocupe un lugar en el banco de suplentes para ser una alternativa en el segundo tiempo.
El resto de los futbolistas se repartieron suerte en distintos equipos argentinos y de América, y sólo Duvan Zapata logró prosperar en su carrera profesional jugando en Europa.