El actor, protagonista de Star wars: los últimos jedi, una de las entregas más esperadas de la saga galáctica, se mostró disconforme en cuanto al giro que tomó el mítico personaje al que supo darle vida en los 70
24/12/2017 - 00:00hs
El estreno de Star wars: los últimos jedi era uno de los más esperados por los fanáticos, no solo porque continuaría la historia iniciada en el Episodio VII, sino porque finalmente se podría ver en acción a Mark Hamill interpretando al mítico personaje de Luke Skywalker.
Sin embargo, al contrario de lo que cualquiera podría imaginarse sobre las emociones de Hamill al volver a encarnar el papel más icónico de toda su carrera, el actor confesó que no esperaba encontrarse con un Luke así y que desde que leyó el guion estuvo en desacuerdo con cómo se desarrollaría la historia del querido jedi.
En una de las entrevistas promocionales de la película, que está subida a YouTube y se ha vuelto viral, Hamill reveló las discusiones que tuvo con Rian Johnson, director del Episodio VIII. “Le dije que los jedi no se rinden. Incluso si hubieran tenido un problema, les habría llevado quizás un año, pero se habrían reagrupado y lo habrían intentado de nuevo. Si Luke cometió un error, intentaría enmendarlo. Ahí teníamos una diferencia fundamental. Pero ya no es mi historia, es la historia de otra persona y Rian necesitaba que yo actuara de una manera concreta para que el final fuera efectivo”, aseguró el actor.
En este sentido, Mark parece extrañar al Luke que George Lucas, creador de la saga, dio a conocer al mundo 40 años atrás con La guerra de las galaxias, El imperio contraataca y El regreso del jedi. “Esta es la siguiente generación de Star Wars, así que casi tenía que pensar en Luke como si fuera otro personaje. Quizás es Jake Skywalker, no es mi Luke Skywalker. Pero tuve que hacer lo que Rian quería que hiciera, porque le sirve a la historia”, continuó el intérprete. “Todavía no lo acepté completamente, pero es solo una película y espero que a la gente le guste, que no se molesten”, agregó.
Cabe destacar que Hamill no es el único que ha tenido problemas con la octava entrega. Algunos fanáticos, tal vez los de la vieja escuela, han hecho un sinfín de comentarios y valoraciones negativas en sitios especializados como Rotten Tomatoes, en donde el filme mantiene una aprobación del 54% por parte de la audiencia, una calificación que dista mucho de la apreciación de los críticos, que tiende a ser bastante positiva, acercándose al 93% de aceptación. Sin embargo, los números acompañan: en poco más de una semana, la película ya recaudó 600 millones de dólares en todo el mundo. En la Argentina ya la vieron 400.000 personas, cifra que continúa en crecimiento.