Susana Giménez, una pasajera en trance

En plena pandemia, la conductora junto a su hermano viajaron en un vuelo autorizado con destino a Uruguay. La polémica no tardó en llegar. En su defensa, dijo: “Después de 65 días encerrada en mi casa sola, tenía derecho a venir acá”.

La diva de los teléfonos, Susana Giménez Aubert, causó un revuelo nacional. Decidió, junto a su hermano, el cantante y periodista Patricio Giménez viajar a La Mary, su casona uruguaya, mientras rige un aislamiento social, preventivo y obligatorio.

Antes de su osada travesía, emprendió los trámites correspondientes, por ejemplo la solicitud de aprobación para su ingreso en Uruguay, la constatación de su residencia y obtener la autorización de Migraciones y ANAC (Administración Nacional de Aviación Civil) para trasladarse en un vuelo privado con destino al país vecino. Además, presentó la documentación necesaria ante la Cancillería de ambas naciones. El objetivo de su escapada fue motivado por las obligaciones que debía cumplir con respecto a su propiedad. Entre ellas, el pago de los servicios, los sueldos del personal y visitar a sus mascotas.

Además, debía llevar a Rita, la perrita de tres meses que pasó sus primeros días de vida en su residencia de Buenos Aires, luego fue devuelta al criadero por su comportamiento de cachorra y por último ubicada en la casa de veraneo.

Ante la explosión de la aventura, Susana brindó una entrevista en el programa de Luis Novaresio para limpiar su buen nombre. En su defensa, exclamó: “Después de 65 días encerrada en mi casa sola, tenía derecho a venir acá”. Asimismo, firmó una declaración jurada dando cuenta de que la vuelta será financiada por sus propios medios (sin exigir un vuelo de repatriación) y que cumplirá un confinamiento de 14 días tal como se exige en estas circunstancias. En este sentido, se mostró indignada por el revuelo mediático e insistió en que fue víctima de un ensañamiento. También asumió que, en caso de no poder regresar, se quedará en Punta del Este hasta el final de la medida en Argentina; porque no llevará a cabo su programa en su edición semanal del 2020. Al respecto, la rubia debilidad aseguró que nunca pudo concretar una reunión con sus productores ni trabajaron sobre el magazine semanal que lleva su nombre.

Tras emitir las opiniones del viaje y su parecer respecto a la gestión de Alberto Fernández en las señales de la competencia, las autoridades de Telefe estarían incómodas. Esto se debería a que la reconocida estrella, que también es su empleada, no priorizó a la emisora.