La exitosa historia inglesa juvenil que no pudo versionarse en EE.UU. llegó a su fin después de siete años. Sus personajes más representativos regresaron para la despedida.
04/08/2013 - 02:40hs
La serie adolescente que causó sensación a nivel mundial en los últimos siete años llegó a su fin. El desenlace fue concretado con un capítulo doble sobre Cook, el joven desquiciado que atrapó a los televidentes con sus múltiples problemas de conducta y salvaje modo de festejar. Fue antecededido por capítulos sobre Cassie y Effy, los otros dos personajes favoritos de la serie que cautivaron a los internautas argentinos que miraron la historia completa desde páginas como cuevana, o la descargaron mediante torrents.
El éxito del programa inglés intentó exportarse a los EE.UU., sin éxito. Los personajes originales resultaron irremplazables y obligaron a sus productores a extender durante siete años su permanencia en pantalla.
Nuestra insistencia en recomendar Skins parte de la base de analizar un producto que puede ser fácilmente comparable con las películas juveniles más taquilleras de los últimos tiempos. Spring Breakers, puede ser uno de los mejores ejemplos. El termómetro de la audiencia juvenil reclama aventuras peligrosas, de clase media, que puedan ayudar a jugar con sus fantasías de fin de semana. Desgraciadamente, los problemas que planteó la serie, tales como la anorexia, la discriminación, varipintas relaciones peligrosas con las drogas legales e ilegales, tienen mucho que ver con las actuales generaciones, que se engancharon con complementos lógicos de una historia generacional: un buen vestuario que copiar, una banda de sonido muy actual y la contención que cualquier novela generacional pueda brindar a su público.
El actor Jack O'Connell, a quien vemos en imagen, apareció hace años en la cuarta temporada de Skins interpretando a Cook. Días atrás dio cierre a un proyecto que decayó un poco pero levantó cabeza y se fue vitoreada. Su historia, al igual que la de los otros dos personajes de cierre, se enfrentaron al desafío de dejar atrás la adolescencia y enfrentar –como pueden en algunos casos- la adultez. Es por eso que estos capítulos pueden verse independientes de toda la serie, que sigue siendo recomendable y no ha quedado desactualizada. De ella recordaremos muchachos maquiavélicos fanáticos de Nietzsche, jóvenes hermosas conscientes y aprovechadoras de su belleza y algunas historias de amor que no necesariamente terminan bien.