Los incrementos en 2018 son dispares, pero en general superan ese porcentaje. Para llenar la mochila con los útiles básicos, este año se puede llegar a gastar hasta $3.500
Año a año, marzo se perfila como uno de los meses más difíciles de afrontar para los bolsillos de los padres con niños en edad escolar. Con respecto a 2017, los útiles registraron aumentos dispares que en la mayoría de los casos tienen como piso el 25% y pueden rondar el 50% en algunos productos.
El relevamiento realizado por diario Hoy sobre un total de 16 útiles escolares, que incluye guardapolvo, mochila, cartuchera, lápices de colores, fibras y una carpeta entre los productos más costosos, arrojó que se puede llegar a gastar un total de $3.300 para proveer a los niños de todos los elementos básicos para empezar las clases. Sin embargo, también se puede alcanzar el mismo objetivo resignando calidad y gastando un 42% menos.
Así, por ejemplo, mientras el año pasado un guardapolvo valía $290, ahora puede llegar a costar $430, un 48% más. A principios de 2017 se podían conseguir mochilas con rueditas a $700, hoy no bajan de los $800 y, en promedio, los precios de este artículo rondan los $1.000. Esto representa un 42% más.
Las cartucheras de calidad media, que en 2017 se conseguían por $150, hoy arrancan en los $200, un 33% por encima. Las pinturas de 12 unidades que antes valían $40 ahora están $50: un 25% más. En el caso de las fibras, en su versión de 12 colores, pasaron de valer $40 a $46, lo que representa un 15% de incremento. Las carpetas de tres ganchos, que a principios de 2017 valían $42, ahora están a $62 (47% más caras).
“La gente viene con miedo a ver cómo están los precios”, contó a este medio José Schwartzman, que desde hace décadas lleva adelante una importante librería céntrica. “Al llegar, la gente se tranquiliza porque hay aumentos normales, que fluctúan entre un 15%, un 20% y hasta un 30% según los productos, pero hay mucho surtido y diferentes opciones”, agregó.
Además de los útiles mencionados, la canasta relevada por este medio incluye un cuaderno de 100 hojas, una lapicera azul, corrector, resaltador, adhesivo, goma, lápiz, repuestos de hojas ralladas y cuadriculadas, compás, tijera y regla. El combo cuesta unos $3.500, pero su versión más económica se consigue por $1.900.
A no alarmarse, ya que, según la experiencia de Schwartzman, siempre es posible economizar: “Yo suelo decir que el gasto final depende mucho de si las mamás vienen con los nenes a comprar o si lo hacen solas. Ellas quieren gastar lo indispensable y pueden hacerlo llevando productos de muy buena calidad, pero de marcas alternativas o sin licencia. Pero cuando vienen con los chicos, ellos piden los útiles con sus personajes favoritos y eso sale mucho más caro. Por ende, sin sus hijos gastan menos”.
Además, para hacerle frente a marzo, muchas familias apelan al alivio de los descuentos. “La gente espera hasta último momento las rebajas de los bancos, sobre todo del Provincia, que en años anteriores ofrecía hasta un 30%”, afirmó Schwartzman.