Despegó ayer por la tarde desde Cabo Cañaveral, Florida. Puede ser la clave para llevar una misión tripulada a Marte
El gigante “Falcon Heavy”, el cohete más potente del mundo, despegó ayer por la tarde desde Cabo Cañaveral, Florida, para realizar su primer vuelo de prueba e intentar dejar orbitando alrededor del Sol un auto modelo Roadster de la automotriz Tesla.
Miles de personas se acercaron a los alrededores del Centro Espacial Kennedy de la NASA para asistir al histórico despegue del cohete con el que la empresa Space X pretende realizar misiones a Marte. La partida se retrasó más de una hora y media debido a las condiciones meteorológicas.
El “Falcon Heavy” se compone de dos cuerpos laterales conectados al núcleo central: en total suman 27 motores que “generan más de 5 millones de libras de empuje en el despegue, equivalente a aproximadamente dieciocho aviones Boeing 747”, según el detalle técnico (ver infografía).
En la primera etapa, los dos cohetes laterales se separaron y volvieron a aterrizar. En tanto, la cápsula con el Tesla Roadster (con un maniquí al volante) que el cohete llevaba como carga útil se desprendió correctamente. La segunda etapa de la misión intentará colocar el automóvil Roadster en una órbita elíptica alrededor del Sol, entre la Tierra y Marte.
Según anunciaron los desarrolladores del proyecto, el vehículo quedará por miles de años orbitando alrededor del astro. El objetivo de este envío será chequear la posibilidad de lanzar futuras cargas útiles. Las misiones de prueba como esta suelen llevar bloques de acero o concreto como simuladores de masa, pero SpaceX decidió que sería mejor lanzar “algo divertido y sin valor sentimental irremplazable: un coche Roadster rojo para el planeta rojo”, afirmaron voceros de la firma.
Desde la empresa recordaron que esta misión es un vuelo de prueba, por lo que “incluso si no se completan todos los hitos experimentales que se intentan durante esta prueba, podremos recopilar datos críticos a lo largo de la misión”.
Con este avance tecnológico, la compañía de Elon Musk se muestra como la firma capaz de transportar mayor carga a menor coste para clientes tan poderosos como la NASA y las empresas de satélites de telecomunicaciones. El objetivo a futuro es llegar a Marte.