Si bien se manejan varias hipótesis del declive, no se confirmó aún la principal razón. Se estima que los países del África subsahariana representarán la mitad de los nacimientos mundiales para el 2100.
A diferencia del siglo pasado, donde las tasas de natalidad crecieron de forma prácticamente constante, a día de hoy se está registrando un fuerte descenso. La tasa bruta de reproducción comenzó a descender a nivel mundial desde hace ya varios años y ahora los científicos lo han podido terminar de confirmar. Esta particular tendencia global, que antes se daba solamente en países ricos, obliga a repensar ciertas lógicas en las naciones, ya que ante el envejecimiento poblacional y el nulo recambio se ven afectadas, entre otras cosas, las finanzas públicas.
Según el informe publicado por un equipo de investigadores, posiblemente la población global llegue a ser de 10.000 millones de cara al futuro, pero a pesar de eso, después comenzará a bajar velozmente, rompiendo el constante crecimiento histórico. “Lo extraño de la fertilidad es que nadie sabe realmente qué está pasando. Las respuestas políticas no se han probado porque es una situación nueva. No está impulsada principalmente por la economía o la familia. Es algo cultural, psicológico, biológico, cognitivo”, explicó Anna Rotkirch, directora de investigación de la Federación de Familias del Instituto de Investigación de Población de Finlandia.
En cuanto a algunos ejemplos, en Estados Unidos la caída de natalidad registró el año pasado el índice más bajo desde 1979. Por su parte, Japón perdió en el 2023 unos 100 nacimientos por hora, siendo la mayor cantidad en un año desde que comenzaron los registros comparables en 1950. Sumado a esto, Francia tuvo el año pasado la menor cantidad de nacimientos desde 1946. En líneas generales, el informe da cuenta de que tres cuartas partes de los países caerán por debajo de las tasas de fecundidad de reemplazo de la población para 2050, concentrando el crecimiento en una minoría de estados de bajos ingresos en África subsahariana y Asia. Tal es así, que se estima que los países del África subsahariana representarán la mitad de los nacimientos mundiales para 2100.