Tras los correos anónimos que anticipaban un ataque armado en distintas facultades, el gremio ADULP emitió un comunicado en el que rechazó el amedrentamiento y exigió medidas de resguardo para toda la comunidad universitaria.
28/11/2025 - 16:15hs
La circulación de una serie de correos electrónicos con amenazas de tiroteo generó un fuerte clima de preocupación en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y obligó a suspender actividades en al menos una de sus facultades. En medio de esa situación, los docentes universitarios nucleados en ADULP difundieron un comunicado en el que repudiaron enérgicamente el amedrentamiento y advirtieron sobre una “campaña que busca implantar el miedo” en la comunidad educativa.
La alarma se desató este viernes, cuando autoridades de la Facultad de Artes, la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU), la Facultad de Ciencias Médicas (FCM), la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales (FCJyS), la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (FaHCE) y distintas áreas administrativas reportaron haber recibido un correo anónimo que describía un plan para ingresar armado, atacar a personas y posteriormente quitarse la vida.
La simultaneidad de los mensajes activó protocolos de seguridad y medidas de resguardo mientras se analizaba el alcance de la amenaza. Estudiantes, docentes y no docentes permanecieron en alerta hasta que se confirmó la intervención de las autoridades universitarias y fuerzas de seguridad.
En su comunicado, ADULP expresó “preocupación frente a la creciente campaña de intimidación” y remarcó la necesidad de defender la universidad pública como espacio de trabajo, estudio y convivencia democrática. Además, exigieron que se garantice la seguridad de la comunidad educativa ante situaciones que buscan generar pánico y desestabilización.
Según trascendió, el mensaje provino del correo belcebu764@atomicmail.io
, desde donde se detallaba el presunto plan del remitente: “Voy a ir armado este viernes a una de las sedes con los rifles de asalto que ven en la foto para asesinar a tanta gente como sea posible (…) y luego suicidarme”. La amenaza concluía con una frase contundente: “No va a quedar ni uno solo vivo”.