07/07/2016 - 06:41hs
Desde todos los rincones de La Plata surgen incesantes denuncias por falta de energía eléctrica. El denominador común es la ausencia de soluciones de la empresa distribuidora. El drama de los vecinos, que no tienen contención
Desde todos los barrios y localidades de La Plata brotan las denuncias por la falta de energía eléctrica. ¿Dónde están los millones de pesos en subsidios que recibió Edelap en estos años? ¿La empresa cumplió con su parte de responsabilidad en inversiones para mejorar la calidad del tendido y garantizar un servicio digno? ¿Cómo justificar aumentos de tarifas que giran en torno al 400% cuando los vecinos no pueden contar con el servicio de energía eléctrica en las instancias que más lo necesitan?
La situación en la ciudad sobrepasa los límites deseables y los vecinos dan cuenta de ello con denuncias que abarrotan los celulares y se amontonan en el contestador del teléfono de este diario. Son cientos de pedidos, todos los días. Algunos, incluso, expresan el estado desesperante en el que los ciudadanos están sumidos.
Hablar con una máquina
“Desde que cayó un rayo bastante notorio, que en el barrio nos hizo pegar un salto a varios, empezó a oscilar la luz, y desde ese momento sigue igual: todo el día y toda la noche, el servicio es un desastre. Trato de comunicarme con Edelap pero me atiende una máquina en todo momento”, le contó a Hoy un vecino de La Granja, de la zona de142 y 518.
Hay un hilo conceptual que cohesiona todas las quejas de los vecinos: a la deficiencia (en el mejor de los casos) o la desaparición repentina de un servicio básico como la energía eléctrica se suma la falta de respuesta de la empresa. La situación se vuelve más opresiva por ese agravante; la ausencia de Edelap convierte la escena en un drama: no hay un interlocutor, no existe una voz responsable que contenga las justas querellas de los afectados. Es como lidiar con un fantasma que se expresa en dos dimensiones: la oscuridad y la ausencia total.
“Son unas cuantas manzanas en las que no tenemos luz. Hicimos todos los reclamos por teléfono para que vengan a hacer el arreglo, pero atienden máquinas. Y seguimos sin luz”, afirmó una vecina de City Bell que denunció que en la zona de 474 a 476 y de 155 a 160, no hay suministro desde el domingo pasado.
“No sé qué hacer”
“Vimos pasar una cuadrilla de la empresa pero no hicieron nada: como pasaron, siguieron. El barrio depende de la luz porque no hay agua corriente y todos tenemos bombas; hay familias con bebés y entrar es un peligro en plena oscuridad”, agregó la mujer.
“Dos días atrás, por la noche, se fue la luz, y cuando desperté, por la mañana, me encontrécon muchos artefactos eléctricos quemados. Llamé a Edelap para hacer el reclamo pero no me lo quieren aceptar, porque dicen que tengo que llevarlo escrito y respaldado por dos técnicos”, contó una vecina de mediana edad del barrio Savoia (7 entre 477 y 478).
Pero su problema no terminó ahí: “Al otro día, cuando volví del trabajo, noté que otra vez había un bajón de tensión. Hasta ahora sigo con ese problema. Volví a llamar y me siguen dando el mismo número de reclamo. La verdad, estoy muy cansada y no sé qué que hacer”.
Vivir con este karma es inviable y mientras la situación empeora cada día, surge una serie de interrogantes. ¿Cuál será la respuesta de los damnificados cuando reciban facturas que expresan una distancia sideral entre calidad y servicio? ¿La empresa buscará herramientas para resarcir semejante atropello? ¿Los organismos del Estado con competencia en el área y las ONG acompañarán a los vecinos? El tiempo siempre juega en contra de quienes padecen.
“Se afectan derechos de los ciudadanos”
“Se trata de casos que afectan el derecho de acceso al bienestar de los ciudadanos”, le explicó a Hoy Fernando Padovan, director judicial a cargo de la Dirección de Defensa del Consumidor del Municipio. “Tenemos una serie innumerable de reclamos por deficiencias en el servicio de Edelap y otro tipo de problemáticas similares”, agregó el funcionario.
Consultado acerca de la falta de canales institucionales personalizados para atender la demanda de los usuarios, Padovan sostuvo que “se trata de una zona discrecional, porque no está arreglada en la medida de lo necesario: satisfacer los intereses de los consumidores”.
El director municipal lanzó una recomendación para todos los afectados: “Lo que tienen que hacer los vecinos es dirigirse a la oficina que está en la torre 1 (12 y 50), tercer piso. Los reclamos tienen que ser ahí porque es el órgano imparcial que vela por los intereses de los usuarios, no de las empresas. Si los reclamos de los vecinos van a Edelap, que precisamente debe reparar esos inconvenientes, muchas veces pasan a segundo término”.
“En Defensa del Consumidor le damos prioridad a los casos que afectan el interés público, donde está en juego el derecho al bienestar de los ciudadanos. Se puede fijar audiencia conciliatoria entre la empresa y el consumidor o grupo de consumidores, o se dicta una medida precautoria a través del juez de faltas competente”, manifestó Padovan.
Hartos y sin respuestas
Mucho frío, o demasiado calor. Esas son las dos situaciones en las que más se necesita la energía eléctrica, y justamente, las dos en las que más falla el sistema de la región. Y por eso, cada vez son más las protestas vecinales que surgen tras padecer esta falta.
“Lo último que queremos hacer es cortar una calle” explicó a Hoy un vecino de 76 años de El Rincón, que aseguró que lo último que pensaba en su vida era participar de este tipo de reclamos.