Se acentuaron los problemas económicos y un alto porcentaje de los compradores sufrió una reducción de sus ingresos.
07/07/2020 - 17:27hs
La “nueva normalidad” provocada por la pandemia del coronavirus provocó modificaciones en el consumo de carne en el país, fundamentalmente en el esquema de compradores “racionales” e “impulsivos" y los lugares de compra, según un estudio del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva).
De acuerdo al nuevo trabajo del Departamento Promoción Interna del Ipcva, el Covid-19 acentuó los problemas económicos y motivó que casi siete de cada 10 compradores de carne hayan visto reducir su nivel de ingresos durante la cuarentena.
De las personas que atraviesan esta situación, un 84% se definen como compradores "racionales" y un 16% se identifican como compradores más "impulsivos", cuando en un relevamiento encargado por el Ipcva a la consultora TNS-Gallup en 2008, un 79% de los compradores eran reflexivos y un 21% impulsivos.
Según la entidad, este comportamiento se acentúa en función del nivel de gasto en productos cárnicos, ya que dentro del segmento de los compradores racionales, un 42% gastan más de $1.000 por semana y un 58% gasta menos.
Entre los compradores "racionales", 66% lo hace habitualmente en carnicerías y 34% en súper e hipermercados; y, entre estos últimos, 74% vio caer sus ingresos; contra 66% entre los que compran en carnicerías.
Asimismo, mientras que en 2008 los compradores más "impulsivos", aquellos que no planificaban sus compras de carne, representaban 36% de los compradores, hoy en día abarcan sólo 17% del total.
Y, en la búsqueda permanente para lograr una mayor eficiencia en la relación precio-calidad, hoy 8 de cada 10 personas busca ofertas en productos cárnicos, en forma transversal en todos los puntos de venta.
La compra en carnicería pareciera estar siendo más problemática que en supermercados y, en este sentido, los problemas de precios son más nombrados por los compradores de carnicerías que compradores de supermercados.
De acuerdo al relevamiento de precios del Ipcva en el AMBA, si bien las cotizaciones bajaron levemente y se encuentran en una meseta desde hace varias semanas, el precio resulta ser más elevado en las carnicerías si se compara con los precios relevados de los servicios de venta online de las principales cadenas de súper e hipermercados.
En otro orden, el trabajo señala que casi siete de cada 10 personas mantiene su lugar habitual de compra de carne vacuna durante la cuarentena; sin embargo, casi el 30% de la gente tuvo que cambiarlo.
Los mayores cambios en las conductas de compra se dan entre la gente que compra en el formato de súper e hipermercados, pasando a una compra de más proximidad.