Lo reveló una investigación con más de 7.800 personas en los Estados Unidos.
Un nuevo estudio realizado por investigadores del Reino Unido y los Estados Unidos demostró que los espacios verdes tienen un efecto positivo en un marcador genético clave asociado a la exposición al estrés. Significa que exponerse a los espacios verdes frecuentemente puede ralentizar el ritmo de envejecimiento de las células del cuerpo. “Los espacios verdes podrían reducir la edad biológica de una persona entre 2,2 y 2,6 años”, escribieron los investigadores. Para su estudio, se analizaron los datos de 7.827 personas.
La investigación fue publicada en la revista especializada Science of the Total Environment, y reveló que las personas que vivían en barrios con más espacios verdes tenían telómeros más largos, asociados a una vida más larga y un envejecimiento más lento. Cada telómero es una región de secuencias repetitivas de ADN en el extremo de un cromosoma. Sin embargo, los científicos hicieron una aclaración: el efecto positivo de los espacios verdes no basta para compensar otros problemas ambientales, como la contaminación atmosférica.