¡Un teatro en el medio del campo!

La población más “desconectada” de la zona, Parque Sicardi, evoca los buenos tiempos en que los vecinos se unían para salir adelante de la adversidad. La joyita es el teatro comunitario “Hijos del Barro” que armaron en el fondo de una casa. Además, hicieron notables mejoras

"Todos pueden hacer teatro, incluso los actores”. 

La frase de Augusto Boal, el brasileño que hizo del teatro un motivo social, huella que continúa en un rincón de La Plata, muchos años más tarde, Adriana Wirth, que desde que llegó a vivir a Parque Sicardi pensó en armar un grupo que una a los vecinos y promueva la conexión humana, justamente en un lugar donde no hay conexión fácil a los servidores de internet. A sus intenciones se sumaron pronto otras almas afines, como Lorena Di Matteo, quien se considera “parte fundacional” en aquel 2016 cuando iban por los comercios pegando afiches o volanteando. Así empezó “Hijos del Barro”, en una zona sur donde las calles de tierra tienen otra lógica, donde se está a más de diez kilómetros de la Catedral, y donde hace diez años hubo una implosión demográfica merced al Procrear.

Pero el sueño de Adriana tenía muchos detalles. Sorteó escollos, como ese primer escenario que duró solo un año. “Decidí dar teatro comunitario sin costo alguno”. Y así se sumó gente incluso del paraje de Ignacio Correa, donde las luces también son tenues y el celular no es una adicción como en otros puntos del Gran La Plata. “La primera actuación llegó un 3 de diciembre de 2016, con un espectáculo que colmó la expectativa, vinieron 140 personas, con gente asomada por las ventanas, con un salón que daba al medio del campo”, recordó Lorena.

El valor de la confianza

En Sicardi son pocos y nacen relaciones sanas. “Otro mundo”, suelen decir quienes eligieron hacer su casa en la zona. “En nuestra casa teníamos una caballeriza -retoma Adriana-, y como ya existía la base de la confianza, que es uno de los valores más importantes, entre todos decidimos construir el Centro Cultural”. Cuatro palos y un techo, y un espacio de 4 por 6 metros se fue transformando en un lugar mágico. 

En estos momentos en que florecieron las primeras flores que fueron regadas con el sudor del esfuerzo, la idea es sumar distintas disciplinas artísticas y charlas de utilidad para la comunidad. En eso están Adriana y su gran elenco, mientras se va redactando el guión de la segunda obra.

Señalización y luminarias

Gran parte de los que están en el teatro, son los que participan en el desarrollo vecinal, como el mejoramiento de las calles de ingreso y egreso, las luminarias, y una particular cartelería que señaliza el número de las calles (se colocaron sobre la calle 659, de 7 a 22. En ese sentido, hay más señalizaciones hechas por un artesanoque deberá colocar la Delegación Municipal, desde la avenida 7, de 650 a 659. 

Otra de las fuerzas barrialeses la fiesta del Vecino Solidario, para el mes de noviembre.