"Dios bendiga a la mujer paraguaya, la más gloriosa de América"

Internacional

11/07/2015 - 12:50hs

Miles de personas se acercaron a la pequeña ciudad paraguaya de Caacupé para escuchar al sumo pontífice, quien ofició una de las dos misas que realizará durante los tres días de su visita en el país vecino

El papa Francisco ofició cerca de este mediodía (hora argentina) una misa en el santuario de la Virgen de Caacupé, en la ciudad paraguaya que lleva el mismo nombre, bastión del catolicismo en ese país y habló ante más de un millón de personas.

La pequeña ciudad, de 48.000 habitantes, fue invadida por miles y miles de personas, que coparon sus calles y la zona cercana al escenario donde hablará Francisco.

Gloriosas palabras

Tras varios minutos de espera, mientras de fondo se escuchaba a un nutrido coro, apareció Francisco en el altar para iniciar la misa. "Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres", entonó el coro para dar inicio a la ceremonia.

"Este santuario es un lugar de fiesta, de encuentro, de familia. Venimos a presentar nuestras necesidades, a pedir perdón. Venimos siempre porque acá se está en casa y lo mejor es saber que alguien nos espera. Queremos renovar nuestras ganas de vivir la alegría del evangelio", expresó el Papa en sus primeras palabras ante la multitud.

Y agregó: "Este santuario es parte vital de la historia de Paraguay. Estamos hoy, como el pueblo de Dios, a los pies de nuestra madre, a darle nuestro amor. La vida de la Virgen es testimonio de que Dios no defrauda".

También se acordó de la Guerra de la Triple Alianza y sostuvo: "Todos ustedes y todos los paraguayos tienen la memoria viva de un pueblo que ha hecho carne la palabra del evangelio. Quisiera referirme a ustedes: mujeres y madres paraguayas. Han sabido levantar a un país sumergido por una guerra”.

Una ciudad con una larga historia

Según cuenta la leyenda, hacia el año 1600, la virgen María le salvó la vida a un guaraní cuando fue atacado por una tribu enemiga y él, en agradecimiento, talló en madera una virgen morena que los paraguayos veneran hasta hoy: la virgen de Caacupé.

La misa fue la primera de las dos que realizará durante los tres días de visita a Paraguay, donde el 90% de la población profesa la fe católica.

Caacupé, que significa "detrás del bosque de yerba" en guaraní, se encuentra a 54 kilómetros al este de Asunción.