Donald Trump le pone fin al sueño de 800.000 inmigrantes

Internacional

06/09/2017 - 02:04hs

El presidente norteamericano anunció que dentro de seis meses suspenderá el programa de Barack Obama que evitaba la deportación de jóvenes ilegales 

El gobierno que lidera el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el fin del programa que protegía de la deportación a los llamados “soñadores” (dreamers, en inglés), inmigrantes que llegaron de niños al país y que por un decreto de la administración anterior habían logrado un amparo legal que les permitía trabajar y tener cobertura social.

El fiscal general, Jeff Sessions, anunció que “el programa DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, por sus siglas en inglés) será rescindido”, asegurando que los beneficiarios tendrán esa cobertura hasta marzo de 2018, pero aclarando que ya no se aceptarán nuevas solicitudes. 

Sessions, uno de los miembros del gabinete de Trump con posturas más duras en materia migratoria, expresó que el programa que protegía a unos 800.000 dreamers y regía desde 2012, luego de un decreto firmado por el expresidente Obama, “es un ejercicio de autoridad inconstitucional”.

El secretario de Justicia aclaró que la eliminación del programa entrará en vigor en seis meses, un lapso destinado a dar oportunidad al Congreso de tratar de hallar consensos para aprobar una reforma migratoria integral que lidie con la situación de los millones de  indocumentados que se estima viven en Estados Unidos.

La palabra de Trump 

El mandatario norteamericano dijo en un comunicado que el cambio será “un proceso gradual, no una eliminación súbita”.

“Así, en efecto, no voy a limitarme a cortar el DACA, sino más bien voy a dar una oportunidad al Congreso para que, finalmente, actúe”, prosiguió. Además, agregó que no estaba a favor de castigar a niños por las acciones de sus padres.

Protestas en varias ciudades 

Inmediatamente después del anuncio, cientos de “soñadores” se manifestaron en Washington, Nueva York, Denver y otras ciudades del país para protestar contra la “cruel y vergonzosa” decisión del mandatario.

En la capital, concentrados en la plaza Lafayette, justo frente a la puerta de la Casa Blanca, más de medio centenar de personas prometieron mantener la batalla para exigirle al gobierno una solución a su irregular situación migratoria.

“La lucha continúa, nadie nos va a quitar la dignidad”, aseguró, entre lágrimas, Maribel Santiago, quien viajó a Washington desde Nueva York.

Obama se lamentó

En tanto, el expresidente Obama lamentó la situación y se expresó al respecto. “Una sombra se ha arrojado sobre algunos de nuestros mejores y más brillantes jóvenes. Apuntar a ellos es erróneo y cruel”, afirmó en un comunicado el exmandatario.