El frío proveniente del Ártico golpeó desde el lunes a varios estados. Millones de habitantes se encuentran sin servicio eléctrico.
Una tormenta invernal cubrió de nieve hoy el noreste de Estados Unidos y atrasó la vacunación contra el coronavirus, en la estela de una masa de aire polar que provocó un frío récord en el sur y centro del país y dejó a millones sin electricidad en Texas, la capital energética.
El frío proveniente del Ártico golpeó desde el lunes a varios estados más acostumbrados a un récord de calor que de bajas temperaturas, dejó decenas de muertos y forzó a más de siete millones de texanos a hervir agua antes de beberla.
Habrá "nieve y hielo desde las planicies del sur hasta el medio Atlántico y el noreste", alertó el servicio nacional meteorológico (NWS).
En Nueva York, que enfrenta su tercera tormenta de nieve del invierno, se registraban siete centímetros de nieve este mediodía en Central Park, y se espera más hacia la noche, según el NWS.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, indicó que el mal tiempo en gran parte del país retrasó la llegada de dosis de la vacuna contra contra el coronavirus e impidió hacer unas 30.000 vacunaciones.
El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, anunció también el cierre de varios centros de vacunación.
Más de 100 millones de personas que residen en el medio oeste de Estados Unidos están afectadas por estas tormentas invernales de alta intensidad, consignó la agencia AFP.
Greg Abbott, el gobernador de Texas, el estado más afectado por las tormentas, dijo que 1,6 millones de hogares recuperaron la luz, pero que casi un millón seguía sin electricidad este jueves en todo el país, unos 360.000 de ellos en Texas, la capital energética, y el resto en Misisipi, Luisiana, Oregon y Kentucky, según el sitio PowerOutage.us.
En Texas, millones de personas quedaron sin calefacción y usaron leña, parrillas, generadores de gas y hasta sus propios coches para calentarse.
Las empresas de energía decretaron apagones rotativos para enfrentar la alta demanda de calefacción, que coincidió con el congelamiento de turbinas eólicas, cañerías y plantas energéticas.
Las autoridades de Texas abrieron unos 300 "centros de calentamiento". Al otro lado de la frontera sur, las autoridades mexicanas informaron que seis personas murieron a raíz del frío.
Texas es el único estado continental de Estados Unidos que tiene una red energética independiente, pero el frío dejó al descubierto las fallas de su red ante estas temperaturas extremas y los efectos del cambio climático.
El frío glacial dejó hasta ahora 38 muertos en todo el país, la mayoría en accidentes de tránsito, según la prensa estadounidense. Decenas de personas fueron tratadas por intoxicación con monóxido de carbono e hipotermia.
La tormenta ya generó al menos cuatro tornados, incluido uno en Carolina del Norte que mató al menos a tres personas e hirió a 10, según Weather.com.
El frío tampoco perdonó a los animales: una docena de monos, incluido una chimpancé de 58 años, murieron debido al frío en el santuario Primarily Primates, cerca de San Antonio, informó esta organización, que no tiene electricidad desde el lunes.