La vocera del Parlamento Europeo aseveró que la declaración fue amparada por una mayoría “muy grande” dentro del recinto.
Funcionarios de los principales partidos del Parlamento Europeo condenaron ayer a Viktor Orbán, primer ministro húngaro, por comentarios “abiertamente racistas" sobre la “mezcla racial”. En una declaración conjunta, diversas autoridades políticas lo trataron de inaceptable y de violar “los valores consagrados en los tratados de la Unión Europea (EA)”.
La vocera del Parlamento Europeo aseveró que la declaración fue amparada por una mayoría “muy grande” dentro del recinto, con la abstención de grupos conservadores de derecha. En este sentido, los funcionarios, en el marco del descontento generalizado, también instaron al Consejo Europeo y a la Comisión Europea a condenar la declaración realizada por Orbán.
Las expresiones del líder húngaro provocaron una reacción condenatoria amplia, entre ellas, del Comité Internacional de Auschwitz y de Estados Unidos, que lo trató de “inexcusable”.
Orbán afirmó que se “malinterpretaron” sus palabras e intentó justificarlas al argumentar que representan “un punto de vista cultural”. El primer ministro, conocido por su política antimigratoria, rechazó la visión de una sociedad “multiétnica” en un discurso en la región rumana de Transilvania, donde reside una numerosa comunidad húngara. “No queremos ser una raza mezclada” que se junte con “no europeos”, había dicho.
El gobierno de Orbán está hace un tiempo bajo alarma por parte de sus ciudadanos, no solo por una reciente ley que afecta y vulnera los derechos de la comunidad Lgbtiq+ en Hungría, sino también por desobedecer las normas democráticas en materia de corrupción, independencia del poder judicial, medios de comunicación y contratación pública.