24/12/2012 - 19:32hs
Movimientos opositores sirios cifraron en más de 200 los muertos durante enfrentamientos de la víspera entre rebeldes y fuerzas del gobierno, 94 de los cuales perdieron la vida en el bombardeo sobre una panadería de la localidad de Helfaya, en Hama.
Los Comités de Coordinación Local (CCL), que agrupan a distintos movimientos opositores, constataron al menos 316 lugares donde las fuerzas leales al Gobierno perpetraron bombardeos, mientras que el opositor Ejército Libre Sirio atacó al ejército en 156 puntos, según informó la agencia de noticias Europa Press.
Entre las 208 víctimas mortales confirmadas por los Comités figuran "decenas de niños y mujeres", según un comunicado de la organización. La mayoría de los "mártires", como los llaman, en concreto 106, perdieron la vida en Hama, 94 de ellos por el bombardeo sobre la panadería de Helfaya.
Asimismo, 51 personas han fallecido en Damasco y sus alrededores, 32 en Alepo, siete en Homs, seis en Deraa, dos en Deir al Zor, dos en Raqqa, una en Latakia y una en Idlib.
Esta luctuosa lista de víctimas fatales se conoce poco después de que finalizara, sin éxito alguno, una nueva reunión entre el presidente Bashar al Assad y el mediador internacional para Siria, Lajdar Brahimi.
Es que mientras el mandatario dijo que su gobierno busca el éxito cualquier iniciativa que proteja al pueblo y a la soberanía del país, Brahimi aseguró que la situación sigue siendo "preocupante".
"Las conversaciones (con Brahimi) fueron constructivas y el presidente Al Assad subrayó el interés del Gobierno en trabajar por el éxito de cualquier esfuerzo que beneficie a los intereses del pueblo sirio y preserve la soberanía e independencia de la nación", indicó la Presidencia siria en un escueto comunicado que dio a conocer la agencia de noticias EFE.
Brahimi, por su parte, explicó a Al Assad los resultados de sus últimos contactos y conversaciones para tratar de solucionar la situación en el país, inmerso desde marzo de 2011 en una crisis que derivó en una guerra civil.
Pero tras la reunión, el diplomático argelino dijo a los periodistas en Damasco que la situación es "preocupante" y por eso espera que "todas las partes lleguen a una solución".
Debido a los fuertes combates entre el Ejército y los rebeldes en torno al aeropuerto, el diplomático argelino viajó por tierra desde Beirut a Damasco.
Es la tercera visita de Brahimi a Siria desde que asumió el cargo en agosto y podría ser el último en caso de que no se logre ningún avance.
Mientras tanto, Rusia lanzó duras acusaciones contra los rebeles que "con ataques terroristas y secuestros están violando el derecho internacional", dijo el ministro del Exterior, Serguei Lavrov, en una entrevista con el canal estatal en inglés Russia Today emitida hoy.