27/07/2013 - 09:03hs
Durante un acto en el estadio de Morón, acompañada por el polémico Julio Grondona, la Presidenta comparó a Néstor Kirchner con el Papa Francisco. El Sumo Pontífice, cuando era cardenal de Buenos Aires, fue víctima de infinidad de maltratos por parte del gobierno K
En la Argentina, diariamente, hay que escuchar muchos absurdos por par te de la clase dirigente. Pero, difícilmente, se pueda encontrar una incoherencia tan grande como la que ayer pronunció la presidenta Cristina Fernández de Kirchner que, en la inauguración de un estadio de fútbol de un club del ascenso, puso en un mismo nivel al Papa Francisco y a Néstor Kirchner.
En otras palabras, durante un acto celebrado en Morón, quiso equiparar a quien actualmente es el hombre más importante del mundo, líder de más de 1,200 millones de fieles católicos, con una persona cuyo mayor mérito en su carrera política fue tener la suerte de haber estado en lugar indicado para que lo pusieran a dedo como candidato a Presidente. Y que luego, junto a su esposa, desaprovechó una oportunidad histórica, con un contexto internacional altamente favorable para nuestro país, dejando una Argentina socialmente fracturada, con una inflación galopante y con niveles de inseguridad sin antecedentes en la historia.
La primera mandataria estuvo acompañada por los habituales aplaudidores y el polémico titular de la AFA, Julio Grondona, que maneja el fútbol con métodos que hasta le causarían escozor a la mafia italiana.
En ese contexto, CFK no se ruborizó al comparar los conceptos vertidos por el Papa Francisco en Río de Janeiro, respecto a que la Iglesia no es una ONG, con "lo que decimos no - sotros: la política no es una ONG".
"Néstor Kirchner dijo que eran transgresores hace mucho tiempo, ¿se acuerdan cuando les dijo transgredan, salten todos, salgan a la calle", rememoró la Jefa de Estado dirigiendo sus palabras a los jóvenes, mientras los obsecuentes de siempre la aplaudían sin cesar. Hasta festejaron la forma poco ortodoxa que utilizó CFK para pegarle a un balón ubicado en el campo de juego. Las de cla ra - ciones sobre los jóvenes CFK quiso pe garlas a los conceptos esgrimidos por Francisco, que exhortó “a hacer lío” para movilizar a la Iglesia.
Semejante comparación no resiste el menor análisis. Y más teniendo cuen ta que Francisco, desde que era cardenal de Buenos Aires, viene criticando gran parte de las políticas que implementa la administración K, que ha dejado a un millón de jóvenes que no estudian ni trabajan en nuestro país, viviendo en la más absoluta marginalidad. A eso se le suma la atrocidad que significa permitir que puedan votar a los 16 años, con el único objetivo de que los hijos beneficiarios de planes sociales puedan sumar votos fáciles para el oficialismo, siendo extorsionados por el clientelismo político.
Precisamente, el mensaje que vie - ne dando Francisco desde Brasil apunta a la necesidad de que los jóvenes no se dejan manipular por el poder político. En 2007, durante el apogeo del gobierno kirchnerista, el entonces cardenal Bergoglio denunció: “Cuando una sociedad basa el reparto de los bienes, no en el trabajo, sino en la dádiva o en los privilegios pierde el sentido de su dignidad y rápidamente se vuelve injusta la distribución de los bienes, y las personas son transformadas en esclavos o clientes".
El mensaje atacó la matriz de construcción política del kirchnerismo, y generó un resentimiento tan grande en Néstor y Cristina que jamás le concedieron una audiencia oficial cuando el Papa era Arzobispo de Buenos Aires. Fue ese mismo resentimiento el que llevó al gobierno nacional a impulsar una infame campaña de desprestigio, intentando vincular a Bergoglio con la dictadura militar en los días previos y posteriores a la asunción de Francisco en el Vaticano. Llegaron al extremo de difundir una foto de un religioso dándole una hostia al genocida Jorge Rafael Videla durante el proceso, intentando hacer creer que era el actual Papa. Poco tardó en demostrarse que ese religioso nada tenía que ver con el Sumo Pontífice. Y ahora es el propio gobierno el que esta en la mira por haber designado como Jefe del Ejército a un oficial –César Milani- seriamente involucrado con crímenes de lesa humanidad.
Cuestionamientos por la comparación
El precandidato a senador por la Coalición Sur, Fernando "Pi - no" Solanas, cuestionó ayer la comparación de la presidenta Cristina Fernández entre el papa Francisco y Néstor Kirchner, y comentó que “sería bueno que levante las causas de Francisco en la lucha contra la corrupción”.
“Sería bueno que Cristina levante las cau sas de Francisco en la lucha contra la corrupción, el combate a la pobreza y la trata de personas", señaló Solanas, luego de asegurar que "este gobierno protege al delincuente valijero de Ricardo Jaime y a Julio De Vido".
Por su parte, la compañera de fórmula de Solanas, Fernanda Re - yes, señaló que “la Presidenta escucha del Papa lo que ella quiere” porque “Francisco reclamó la inclusión de jóvenes y viejos que son los sectores más postergados en estos diez años de kirchnerismo”.
La postulante a senadora en segundo término de la Coalición Sur, agregó que "el aumento de salarios corre muy detrás de la inflación y está muy lejos de resolver los problemas de quienes viven de su salario" y "de esta manera, estamos cada vez más lejos del 82 por ciento para los jubilados".
“La política tampoco es un negocio“
La candidata a diputada nacional por el Frente Progresista (FP) Margarita Stolbizer salió al cruce ayer de la mandataria Cristina Fernández al expresar que “la política no es una ONG”, pero que “tampoco es un negocio” y agregó que “siendo presidenta, la fortuna K creció de manera meteórica”.
De esta forma, Stolbizer cruzó a la Presidenta en un acto en el partido bonaerense de Morón -los pagos de la dirigente de FP- y en plena campaña proselitista.
Stolbizer denunció que “los funcionarios investigados por la justicia sospechados de corrupción van desde de las altas esferas hasta simples secretarios”. La candidata le pidió además a Fernández de Kirchner “no confundir plantear escenarios donde si no se vota al gobierno se viene la noche porque no es con miedo como se hace una campaña electoral”.