04/03/2014 - 06:15hs
En Avellaneda, el padre de la iglesia Nuestra Señora del Valle denunció que militantes oficialistas usaban un salón del convento para realizar sus reuniones partidarias
Primero fueron las escuelas y ahora también las iglesias. En Avellaneda, municipio gobernado por el intendente kirchnerista Jorge Ferraresi, los militantes del Frente para la Victoria decidieron, sin ningún tipo de escrúpulos, ocupar una parroquia local para realizar sus reuniones partidarias.
El caso se conoció horas atrás, luego de que el padre Luis Domínguez -párroco de la iglesia Nuestra Señora del Valle, de la localidad de Wilde- denunciara que funcionarios comunales y militantes kirchneristas usurparon desde hace un año y medio un salón del convento para desarrollar sus encuentros políticos durante los fines de semana.
En este contexto, el sacerdote hizo responsable a la secretaria de Seguridad del municipio, Mónica Ghirelli, que -de acuerdo a lo denunciado en la Justicia-, habría intentado romper la cerradura del salón parroquial. Otro dato saliente es que el grupo de militantes K empezó a hacer uso del lugar tiempo después de que el propio Ferraresi se hiciera presente en la inauguración de obras de refacción que el municipio realizó en la iglesia.
Por tales motivos, el padre Domínguez elevó una carta firmada por más de 500 vecinos al jefe comunal para que convoque a una mesa de diálogo con la intención de destrabar el conflicto de forma pacífica. Sin embargo, el hecho ya caló hondo en la sociedad, más aún teniendo en consideración los lamentables antecedentes de La Cámpora en las escuelas primarias y secundarias de distintos municipios de la Provincia.