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Aumentan los clientes que no pueden afrontar los pagos de tarjetas de crédito y créditos personales. Se detectó en abril y escaló en mayo.
06/07/2025 - 00:00hs
Primero fue Bloomberg, el prestigioso medio internacional dedicado a las finanzas, quien advirtió sobre el aumento de “la presión financiera sobre consumidores y empresas” en Argentina. Fue mediante una nota publicada en los primeros días de junio, que se tituló “Los recortes de Milei dificultan el cobro de créditos en Argentina”.
A esto se sumó que a fines de junio se conocieron números oficiales de abril del Banco Central de la República Argentina (BCRA), que arrojaron que los pagos del saldo de tarjetas de crédito se encuentran en su nivel más bajo de los últimos tres años, mientras que la morosidad en créditos personales alcanzó máximos históricos de las últimas dos décadas.
Ahora, un reporte de la consultora Labor, Capital and Grouth (LCG) detectó que este fenómeno se profundizó en mayo y junio, lo que comienza a poner en riesgo las acciones de los bancos.
Alerta en los bancos
“La mora del financiamiento a familias, en el marco de calcular pérdidas crediticias esperadas (según normas internacionales) castigará el resultado de los bancos”, señaló el estudio de LCG.
Esta conclusión de da en un año negativo para los papeles del segmento financiero. En lo que va de 2025, la acción del Grupo Supervielle se hunde 25%; la de Banco Macro, un 24,3%; la Grupo Financiero Galicia, un 15% y BBVA, un 11,5% en el S&P Merval. Si bien las bajas de mercado obedecen a cuestiones macroeconómicas, el hecho de que se incremente la morosidad de las familias puede impactar aún más.
Los números de la morosidad
De acuerdo con los datos del BCRA, la morosidad en abril subió a 4,6% en préstamos personales y a 2,9% en tarjetas. En marzo estos números habían sido de 4,1% y 2,8%, respectivamente.
“Diversos bancos comentan que la morosidad continuó en aumento en mayo y junio”, añadió en su informe LCG.
El reporte detalló que “en tarjetas se vio un patrón: primero, cada vez más cancelaciones de montos apenas arriba del mínimo, y luego ni siquiera llegando al mínimo (mora)”.
A su vez, sostuvo que entre los posibles factores de la mora están en primer lugar en que los préstamos a familias, fundamentales para sostener el consumo, comenzaron a tener un gran peso al compararlos con un salario que no termina de despegar y en segundo término, la tasa de interés.
“Con relación al salario, los préstamos personales mostraron una acelerada suba respecto del piso mínimo de abril de 2024, mientras que el financiamiento vía tarjeta de crédito ya se encuentra en máximos. En este contexto, luce razonable que las familias están teniendo dificultades para pagar sus deudas”, sentenció el estudio.
El relevamiento concluyó que “posiblemente estas cuestiones anticipen una mayor desaceleración en el crecimiento de los préstamos a familias y comiencen a generar dudas sobre la capacidad de seguir sosteniendo el aumento del consumo en los próximos meses”.
Por otro lado, según la Cámara Argentina de Empresas de Servicios Financieros (Caefpi), la morosidad en este rubro superior a 30 días escaló al 13,50%; a los 60 días al 10,40%, y se reduce al 8,30% a los 90 días.