18/06/2016 - 07:29hs
A través de una carta, el presunto testaferro K acusa a Casanello de tener vínculos con Cristina. Dice que se lo cruzó en la quinta de Olivos en septiembre pasado. El martes, la Justicia deberá decidir si proceden con la recusación del juez
El abogado del hijo menor de Lázaro Báez, Santiago Viola, presentó una carta de puño y letra en la sala II de la Cámara Federal con una clara intención: apartar al juez Sebastián Casanello de la investigación de la ruta K.
La misiva tiene 19 líneas escritas por el dueño de Austral Construcciones desde el penal de Ezeiza. En la carta explica y da detalles del día en que se cruzó, presuntamente, al magistrado en la Quinta Presidencial de Olivos antes de tener una reunión con Cristina Fernández de Kirchner. Esta última prueba incorporada a la causa no había sido mencionada en la audiencia personal que mantuvo Báez ante los camaristas hace más de una semana, según el mismo empresario, porque no fue consultado sobre el tema.
En caso de comprobarse los dichos, la situación es, por lo menos, difícil para Casanello: la causa por lavado de dinero está bajo su investigación desde 2013 y, según señaló Báez, el encuentro se habría concretado en septiembre de 2015. Más allá de eso, Casanello desmintió terminantemente conocer a la expresidenta en más de una oportunidad. A este intríngulis se le suma la publicación de datos técnicos de llamados telefónicos que lo ubican cerca de la residencia de Olivos en agosto y noviembre del año pasado.
Al socio de Cristina Fernández de Kirchner también se le terminan los tiempos: tiene hasta las 9.30 del martes para cumplir con la requisitoria de la Cámara Federal. Después, la Sala II decidirá si procede o no con la recusación de Casanello.
“Me dirijo a ustedes (las autoridades de la Sala II de la Cámara Federal) a los efectos de ponerlos en conocimiento, en el marco del incidente de recusación del doctor Casanello Sebastián, que aproximadamente a mediados del 2015, con anterioridad a las elecciones generales, vi al mismo en la Quinta de Olivos, cuando estaba esperando para entrevistarse con la entonces presidenta doctora Fernández", comienza la carta del dueño de la empresa Austral Construcciones, escrita el pasado 9 de junio. Unas líneas después, Báez es contundente al afirmar que “la causa está direccionada hacía mi persona, mis hijos y mi familia”.
Luego de que el escrito llegará a la sala II, las autoridades emitieron un despacho que pide notificar a los abogados defensores de Báez: los letrados Rafael Sal Lari y Daniel Rubinovich y solicitaron más información sobre la denuncia. Ante esto, Báez escribió una segunda carta que está en manos de sus abogados defensores, pero quienes aún no cumplieron con la ratificación necesaria para otorgarle validez al escrito frente a la Cámara Federal.
Ahora quedará esperar hasta la semana que viene para ver qué resolución dicta la Cámara Federal con la nueva evidencia presentada por Báez y si Casanello es apartado o no de la causa. Ante esto, la expresidenta podría ser citada para confirmar la visita del jurista a la residencia de Olivos.
Por la causa de la ruta del dinero K, Casanello procesó con prisión preventiva a uno de los contadores de Báez, Daniel Pérez Gadín, y sin prisión preventiva a los hijos de ambos, Martín Báez y Sebastián Pérez Gadín, al asesor Fabián Rossi y al titular de la financiera SGI, más conocida como “La Rosadita”, César Fernández
El escrito surge una semana antes de que el Fiscal Guillermo Marijuan imputara formalmente al hijo menor del empresario santacruceño, Leandro Báez, por lavado de dinero y sobreprecios en la obra pública. Justamente, esta nueva evidencia viene a ratificar las declaraciones que el menor de los Báez había realizado afirmando el vínculo entre Casanello y Cristina. Por la misma causa, Marijuan imputó a un contador de Báez, Fernando Butti, y a cinco allegados más.