12/07/2016 - 06:08hs
Los actos delictivos no paran de crecer. Tres de cada diez argentinos fueron víctimas de un episodio de inseguridad en el último año. El 55% de los hechos criminales tuvieron un alto nivel de violencia
La sensación de miedo en la población argentina es cada vez mayor y el sentido de inseguridad ciudadana se ha incrementado notablemente con el correr de los años. Lejos parece haber quedado la protección que brindaba el agente de la cuadra o el amparo que daba un Estado presente que solucionaba en forma inmediata los problemas sociales.
Ya nadie parece quedar ajeno a la ola delictiva que sacude al país. Hoy, un tercio de los ciudadanos ha sido víctima de algún delito en los últimos doce meses. Un estudio realizado por la Universidad Torcuato Di Tella señala que tres de cada diez argentinos fueron víctimas de un hecho delictivo en el último año, agravando uno de los temas centrales de la sociedad.
El Laboratorio de Investigaciones sobre Crimen, Instituciones y Políticas de la casa de estudios efectuó un trabajo en el que mide el Índice de Victimización (IVI), que cuantifica la cantidad de hogares que sufrieron al menos un delito en los últimos 12 meses, sean estos eventos denunciados o no a una autoridad competente.
Según señala el informe, el 28,2% de los argentinos sufrió un hecho de inseguridad, ascendiendo esa cifra al 29,4% en el conurbano bonaerense, bajando considerablemente en la ciudad de Buenos Aires con el 21,6%, y no tanto en el interior, donde los casos llegan al 26%.
La mayoría de los delitos se cometieron en el hogar o en el barrio, y la infracción más común fue el robo con hechos de violencia, que trepó al 55% de los casos denunciados por la sociedad.
Datos demoledores
El relevamiento muestra que el 22% de los ciudadanos sufrió algún delito, como robo con violencia, lesiones, amenazas, corrupción, ofensa sexual, secuestro, homicidio o estafa, lo que muestra una realidad muy compleja en la materia.
Además, el 20% de los consultados sufrió al menos un delito contra su propiedad, mientras que el 14% padeció hurtos a objetos personales, ocupando un lugar rezagado el robo de autos, que alcanzó al 5% de los ciudadanos.
Los grupos sociales más proclives a reportar actos delictivos fueron los de menos recursos económicos, así como los que tienen una evaluación más negativa de su situación económica, las personas más jóvenes, y aquellos que viven en las ciudades más grandes.
Los actos delictivos se cometen cada vez con mayor violencia y sin causa alguna que los lleve adelante, lo que ha abierto un debate con una polémica que se bifurca por todos los sectores de la sociedad. Estas mediciones no hacen más que mostrar la incapacidad que muestran las autoridades para garantizar la protección de la población.
Una cuestión complicada que divide las aguas en la sociedad, y que al revés de lo que decía el kirchnerismo, que aseguraba que se trataba de una “sensación”, la inseguridad golpea duramente a las familias, sembrando de escepticismo e imprevisibilidad la vida de millones de argentinos.