25/01/2014 - 07:14hs
El haber mínimo jubilatorio cerró 2013 pudiendo cubrir apenas la mitad de la canasta básica de la tercera edad. Especialistas prevén que aumentarán los precios de los medicamentos, los electrodomésticos, entre otros productos
La aceleración del proceso devaluatorio que impulsó el Gobierno esta semana tendrá especiales consecuencias en los sectores con menores recursos, entre los que se encuentran los jubilados y las familias que dependen de planes sociales, que verán pulverizados sus ingresos ante la disparada general de precios.
Cabe recordar que el haber mínimo que cobran los jubilados es de $2.477 mensuales, siendo el 75% de ellos los que lo perciben. Se trata de 4 millones de abuelos.
Este haber ya no alcanzaba, previo a esta devaluación, a cubrir la mitad de la canasta básica del sector, que se encuentra en $4.885 por mes, según los cálculos la Defensoría de la Tercera Edad de la Ciudad de Buenos Aires, que contemplan en este relevamiento los bienes imprescindibles que necesita un jubilado para vivir.
“En una economía globalizada, en donde muchos de los insumos que se comercializan en Argentina están atados al dólar, lógicamente van a aumentar los valores. Es imposible que se cumpla lo que dice el Ministro Axel Kicillof, de que no va a impactar en los precios”, señaló a Hoy, Fernando Blanco Muiño, titular de la Unión de Consumidores de Argentina.
“A mayores precios, con igual jubilación e iguales salarios, indudablemente el poder adquisitivo baja y eso genera también una merma en la calidad de vida”, agregó el especialista.
Durante todo el año pasado las jubilaciones fueron perdiendo terreno ante la inflación, ya que los precios aumentan semana a semana y los haberes de los jubilados se ajustan cada 6 meses, sin que se compense la inflación pasada.
Tiemblan los acuerdos
Sobre los recientes anuncios del Gobierno en torno a la virtual flexibilización del cepo cambiario, Blanco Muiño aseguró: “Por ahora son sólo anuncios, no hemos visto todavía cómo se va a implementar, cómo la AFIP va a trabajar en las autorizaciones para la compra de moneda extranjera. Hasta ahora siempre fue con un criterio absolutamente restrictivo, sin conocerse cuáles eran los requisitos que había que tener para poder contar con la aprobación del organismo”.
Por otra parte, destacó: “En este marco inflacionario y ahora con esta devaluación de la moneda todo se desvirtúa porque el acuerdo de precios establece una pauta que le permite a las cadenas de supermercados y a los proveedores denunciar la imposibilidad de cumplir con el precio acordado. Lo que nosotros podemos presumir es que con esta devaluación los precios acordados van a ser de imposible cumplimiento y naturalmente el acuerdo va a quedar desvirtuado”.
En esta situación, quienes verán notablemente afectado su ya vapuleado nivel de vida serán los sectores de trabajadores de menores ingresos, que son quienes dependen de planes sociales como el Argentina Trabaja o Ellas Hacen. La última suba de salarios para este segmento de la población dejó sus sueldos entre $2000 y $2400. Es decir, no alcanza ni siquiera el salario mínimo, que se ubica desde este año en $3.600.