14/03/2014 - 06:45hs
El escándalo por los barras en Quilmes continúa dejando tela para cortar y las consecuencias se ven de puertas para adentro. Primero fue el jefe comunal K Francisco “Barba” Gutiérrez quien realizó duras acusaciones contra el senador nacional -y actual presidente del club cervecero-, Aníbal Fernández, por los graves hechos de violencia. Y ayer, el diputado provincial Fernando Pérez (UCR) sentenció que “Fernández es el presidente de un club que tiene un sector de la barra apañada por él y otra allegada al intendente”.
Pérez resaltó además que “miente el intendente cuando dice que jamás intervino en la política del club. Lo hizo y lo hace. Y no solo en el QAC, sino también en Argentino de Quilmes”.
Mientras tanto, la arena política de la interna kirchnerista sigue sacudiéndose por los rumores que circulan en el Palacio Municipal de Alberdi al 500.
Se habla de que el barbismo y el anibalismo mantienen una suerte de pacto para garantizar la gobernabilidad hasta el 2015 y no tensar más la situación dentro del Concejo Deliberante, pese a que algunos ediles todavía se muestran reacios a mostrar su apoyo a las iniciativas oficialistas (algo similar también ocurre en el seno del Frente Renovador, en donde también existen ciertas divergencias).
Sin embargo, las fuertes críticas que formuló el jefe comunal quilmeño contra el otro referente político kirchnerista podrían poner en riesgo el acuerdo tácito entre ambos sectores, algo que, por inercia, podría perjudicar al propio Gutiérrez de cara al futuro.