27/12/2016 - 05:00hs
Si bien semanas atrás ya se especulaba con el alejamiento del titular de Hacienda y Finanzas, ayer el Presidente ordenó comunicarle la decisión. La cartera queda dividida en dos
Tanto se especuló durante los últimos meses con la posibilidad de que la paz social se viera alterada en diciembre, que resultó llamativo que el sacudón político-económico que inauguró la última semana del año proviniera de las propias entrañas del Gobierno. Ayer al mediodía, el jefe de Gabinete Marcos Peña anunció la salida del ministro de Economía Alfonso Prat Gay y el desdoblamiento de la cartera de Hacienda.
Según la versión oficial, los dos hechos son indisociables. En la conferencia de prensa que dio Peña en la Casa Rosada, sostuvo que fue el Presidente Mauricio Macri quien le pidió la renuncia al titular de la cartera de Hacienda y Finanzas “debido a las diferencias que había sobre el diseño del funcionamiento del equipo”.
Se refería a la decisión del jefe de Estado de dividir el área en dos, con lo cual Prat Gay debía comenzar a reportarse a los vicejefes de Gabinete, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, además de mantenerse en un plano de igualdad con el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger.
Peña sostuvo que el ahora exministro de Economía estaba en desacuerdo con el esquema planteado por Macri para la toma de decisiones y que “en función de esa decisión” se le había pedido la renuncia.
Para reforzar el argumento oficial, el jefe de Gabinete insistió en que la salida de Prat Gay no fue consecuencia de “diferencias sobre la política económica”, sino que “se trató, en todo caso, de una discusión que ha estado abierta todo el año respecto al diseño organizacional del Gobierno y al proceso de toma de decisiones”.
Por lo bajo, desde la Casa Rosada admiten que la relación entre Prat Gay y la línea que responde a Marcos Peña se había vuelto insostenible.
Lo cierto es que, si bien los rumores de alejamiento sonaban desde hace varias semanas enmarcados en la demora de la reactivación económica prometida por Macri para fin de año, todo indica que la derrota del proyecto del impuesto a las Ganancias, que había elaborado Prat Gay y que fue volteado por la oposición en el Congreso, fue el detonante de su salida.
Los nuevos nombres
Con el desdoblamiento del ministerio, Hacienda quedará a cargo del economista Nicolás Dujovne y la cartera de Finanzas pasará a ser controlada por el actual secretario del área, Luis Caputo.
Según comunicó Peña, Hacienda tendrá el “desafío de diseñar un plan fiscal” y para Finanzas, el objetivo será seguir “consiguiendo financiamiento”.
Fuentes oficiales indicaron que Macri firmará en las próximas horas el decreto que divide los ministerios y designa a los nuevos titulares, quienes asumirán sus funciones ni bien se publique la norma en el Boletín Oficial.
El costo político de Ganancias
Luego del revés sufrido en el Congreso con su proyecto de ley del impuesto a las Ganancias, el ahora exministro había tenido un rol secundario en la negociación con la oposición por la modificación de la norma, quedando al margen de la discusión política (ver aparte). Incluso, la ley que fue aprobada ofreció concesiones fiscales que él había defendido en forma tenaz.
Aún así, fuentes oficiales aseguran que Prat Gay se mostró sorprendido ayer por la mañana, cuando el jefe de Gabinete le comunicó la decisión del Presidente. Después de ese encuentro, el todavía ministro se subió a un avión y voló hacia Villa La Angostura, donde vacaciona Macri, para conocer de primera mano las razones de tal decisión.
Un final anticipado
Alfonso Prat Gay asumió su cargo en el Ministerio de Hacienda como una de las figuras más relevantes de Cambiemos. Su gestión tuvo un buen inicio, cumpliendo con dos de los objetivos encomendados por el Presidente: la salida exitosa del cepo cambiario y la renegociación con los holdouts.
Sin embargo, poco a poco se fueron conociendo importantes diferencias con integrantes del equipo de Gobierno. El primer enfrentamiento se dio con Federico Sturzenegger, el titular del Banco Central, que reconoció el alza de precios mientras Prat Gay planteaba que la inflación en la Argentina ya no era un tema preocupante. Otro cruce fue con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien lo criticó puertas adentro cuando el ministro habló de “la grasa militante”, en el contexto de los despidos que realizó el Gobierno en el Estado.
El tarifazo del gas también generó cortocircuitos en la relación con el ministro de Energía, Juan José Aranguren. Tampoco era buena la relación con el presidente del Banco Nación, Carlos Melconian, quien solía cuestionarlo por su “gradualismo”.
La última escena remite al debate por Ganancias: el Gobierno nacional decidió “congelar” a Prat Gay en las negociaciones con las CGT y le dio un rol secundario en el diálogo con los gobernadores, poniendo de relieve algo que finalmente ayer se concretó.