14/05/2015 - 12:21hs
Javier Caraballo, el único precandidato a intendente del radicalismo en el partido de General Alvarado, cuya ciudad cabecera es Miramar, atendió a diariohoy.net en un reportaje que ahondó en el delicado tema de la inseguridad que los toca de cerca: este año se realizó una pueblada en las calles por una serie de robos.
Junto a este, la campaña de la UCR local lleva otros dos ejes: la salud (el Hospital Municipal se quedó sin tomógrafo y sin la atención de otros tiempos) y el turismo. Respecto a ésto último, quien fuera edil por cuatro años (2009-2013) advirtió sobre "lo dinámico que es todo, ahora la gente tiene otras expectativas para el descanso, por el crecimiento de Mar Azul, Mar de Las Pampas, San Cayetano y Orense, algunos de los balnearios que antes no existían”.
Frente a las PASO, se apresta "una disputa contra la gente del PRO, que acá tiene dos líneas, y la Coalición Cívica que tiene uno”, explica mientras se hace tiempo para pedir al mozo el cafecito de las diez y media, en un boliche de Miramar que nunca dejó, como así tampoco su residencia en la ciudad desde el mismo día en que nació.
El distrito es gobernado hoy por el massismo, proceso iniciado en 2011 con el surfista devenido en senador, Patricio Hogan, al que el Dr. Germán Di Cesare reemplazó en 2013.
Si bien Caraballo declara no tener enemigos “ni siquiera en la política”, el comerciante inmobiliario patalea por varias actitudes asumidas por las autoridades municipales. “Eran del FpV y se fueron con Massa. Pero además de la dificultad de cambiarse de vereda, han creado un distanciamiento con el gobierno provincial en forma hasta insultiva contra el gobernador Daniel Sicoli, primero era Danielito y después ese tonto… Se puede criticar pero de una manera respetuosa. Tenemos otro tipo de hacer política, de tener las orejas mas grandes que la boca”.
“Hay que refundar Miramar”, clama quien lleva una ventaja de un radicalismo todavía fuerte en estos lares, con 5 mil afiliados. Este año para Carballo cayó uno de esos frutos que da la madurez y experiencia en la política: los boina blanca lo eligieron como el único precandidato a intendente, siendo uno de la camada “Sub 40” de la quinta sección electoral, como la bautizó el presidente del partido, Ernesto Sanz.
Inseguridad: "falta decisión política"
Caraballo profundizó en el aspecto más delicado que se vive en el país y del que General Alvarado no se encuentra aislado: "Ahora es un lugar medianamente tranquilo, no hay hechos delictivos de violencia, sí hay robos como en cualquier lado. Pero en las localidades del interior del distrito, cuando surge algún hecho delictivo, la gente se altera. En Mechongué, en el transcurso de este año, hubo dos robos y se hizo una pueblada en la calle, la gente se altera enseguida".
Puso una lupa en los “lazos” con Mar del Plata, puesto que la cercanía de 35 kilómetros con una ciudad donde el crimen es una sombra constante.“Acá nos conocemos todos, el honesto y el chorro se cruzan en la esquina a cada rato, y lo lamentable es que el delito local se perfeccionó, estamos a 35 km de Mar del Plata, por un camino local y no el de la costa. Hay que tener mayor prevención. La droga está muy emparentada con el delito. Pero si no hay decisión política, todo queda al libre albedrío”, señaló.
En otro tramo de la nota, Javier Caraballo marcó su deseo de volver a debatir y no confrontar, sino ¡tendríamos que andar todos con la ametralladora bajo el brazo! Pero la verborragia de la Presidenta Cristina Fernández ha sido como un goteo a nivel nacional, que cayó hasta el rincón más chiquito del país. Es poder para hacerlo sentir al poder, y pasó acá en el pueblo también… Cuando eran FpV pensaban de un manera, y cuando fueron massistas, de otra. El radicalismo siempre estuvo en la misma vereda. Y en un pueblo se siente mucho, porque algunos hasta sintieron persecución en plena democracia”, finalizó.
De recorrida por el pueblo
“El plano de Miramar es el de La Plata, es el mismo molde de una plaza central de cuatro manzanas, de la cual salen cuatro diagonales hacia los puntos cardinales; sólo faltaría la continuidad de diagonales como tienen ustedes”, ilustró a este medio el radical de 46 años, con experiencia extra para hablar de planos: tiene 46 años y desde los 17 años trabaja en el rubro inmobiliario. Por otra parte, expresó con orgullo que el apellido Caraballo aparece en los papeles de Miramar en 1910 con el arribo de su abuelo.
Por último, el ex edil tuvo tiempo para un recorrido por General Alvarado. La cabecera del partido es Miramar (23 mil habitantes, pero también hay otros pueblos como Comandante Nicanor Otamendi (12 mil, "la capital de la papa"), Mechongué (3 mil, donde se emigra mucho y los estudiantes terciarios rumbean a Mar del Plata para no volver) y Mar del Sur (no llega a mil habitantes, una villa balnearia de playas vírgenes, con un pequeño minimercado y un solo hotel construido en 1903).