04/12/2013 - 17:49hs
Las últimas elecciones todavía dan que hablar. Esta vez las lenguas (no las malas) fueron a fondo con uno de los candidatos que figuraba en una boleta, pero que había fallecido casi dos meses antes.
Se trata de Carlos Alejandro Massad, quien figuraba en las boletas del FAP.
Después de aquel domingo 27 de octubre, en la redacción del periódico “Aquí Morón”, se recibió un llamado de un familiar del difunto. La indignación incluso venía de las semanas previas a la emisión del voto, cuando se repartían las boletas a domicilio, con lo cual podría haberse cambiado su nombre en la lista por el del suplente.
¿Es ético usar el nombre de un fallecido con una vida prestigiosa para sumar votos? ¿Desconocían su muerte? Massad fue licenciado en Trabajo Social, tenía un posgrado en Especialización Ambiental de la Universidad de La Matanza.
Massad había fallecido el 9 de septiembre en un accidente de tránsito en la ciudad de Azul, tras el choque de dos autos, cuatro personas fallecieron en la Ruta 3, kilómetro 264. Además de la trágica partida de Carlos Massad, en el acto perdieron la vida sus dos hijos, Carlos Nahuel de 22 años y Tahiel de 10, mas un amigo de la familia conocido como Gabriel Castillo de 25, todos roiundos de El Palomar.