13/07/2015 - 06:02hs
La muerte del ex fiscal Alberto Nisman sigue generando más dudas que certezas, y es que a los nulos avances que pueden verse en la investigación judicial, se agregan datos venidos del extranjero que hablan sobre las chances certeras de que su fallecimiento se haya debido a un homicidio.
La tercera pericia hecha sobre el cuerpo de Nisman en los Estados Unidos al mando de Cyril Wecht, sembró todavía más incertidumbre al caso, al sostener abiertamente que no se trató de un suicidio, sino de un asesinato.
Según el examen hecho por el perito norteamericano, es razonable pensar que si alguien se quiere matar va a tener el arma contra la cabeza, y que la misma no va a estar alejada más de un centímetro como sucedió en este caso. Además, afirma que no hay sangre en dos dedos de la mano derecha, debería haber tenido más sangre en la mano y en el dorso de la que tenía, debería haber un montón de sangre salpicada que no había.
Es difícil explicar por qué había sangre en su mano izquierda para estos expertos. Para ellos, sería imposible e incomprensible que Nisman haya usado las dos manos para suicidarse.
Otra de las razones argumentadas por Wecht se da por la lista de compras de alimentos encontradas en el departamento de Nisman, lo que no es algo que normalmente alguien que tenga tendencias suicidas hacen, porque quienes se suicidan no tienen pensado alimentarse porque no tienen ganas de vivir ni de mirar al futuro, lo que da para pensar que haya podido ser un homicidio.
Un nuevo enigma que se cierne sobre la muerte de Nisman, que abre más preguntas que respuestas, y que deja a la labor realizada por la Justicia argentina muy mal parada por su incapacidad para resolver un caso que ha causado conmoción en la sociedad.