02/06/2016 - 06:09hs
Luego de que Vidal nombrara como ministro de Justicia a un exfuncionario sciliosta, sospechado de reportar a Angelici, la diputada hizo una presentación judicial contra el exmandatario provincial. Lo acusó de haber desviado fondos de organismos bonaerenses con la complicidad de funcionarios que todavía continúan en sus cargos
"Inmanejable”, tal como la definió la vicepresidenta Gabriela Michetti, la función de la diputada nacional Elisa Carrió como aliada de Cambiemos parece ser la de intentar depurar a la gestión de Cambiemos no sólo a nivel nacional. También en la provincia de Buenos Aires.
En este contexto debe inscribirse la denuncia -la acción y no la mera intención- penal que la líder de la Coalición Cívica-ARI (CC-ARI) presentó el martes en la UFI 11 de La Plata, a cargo del fiscal Álvaro Garganta, contra el exgobernador Daniel Scioli por “defraudación a la administración pública y lavado de dinero”, al considerar que el excandidato presidencial del Frente para la Victoria habría montado una serie de sociedades a través de las cuales transfería fondos de diferentes organismos del Estado provincial, tales como: IOMA, ABSA, Lotería y el Puerto de La Plata, según se menciona en el texto al que tuvo acceso Hoy.
La presentación incluye a Scioli y alcanza también a su exjefe de Gabinete, Alberto Pérez, a funcionarios de diversos organismos apuntados -bajo el cargo de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”- y al fiscal de delitos complejos, Jorge Paolini, por “encubrimiento”, y quien, de acuerdo a la acusación, sería ahijado del exministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal, y habría que habría contado con el paraguas protector de la Procuradora bonaerense, María del Carmen Falbo.
En el documento, la diputada nacional sostuvo que el exmandatario provincial habría utilizado una serie de testaferros para montar sociedades que realizaban negocios con el Estado y, a través de copiosa documentación, aporta nombres (como el del expresidente de ABSA, Guillermo Scarcella, quien aparece como “propietario” de tres campos de Scioli en Tandil), direcciones y detalles de las presuntas maniobras: a través de cuentas especiales y partidas extrapresupuestarias con las que se les habría pagado a sociedades, con millonarios retornos para el exgobernador.
Así, más allá del discurso y los montajes declarativos, con esta denuncia contra la anterior gestión provincial -sumada a las críticas contra el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay (ver aparte)- Carrió busca marcar la cancha, pero sin patear el tablero. Lilita sabe que si va a fondo terminaría beneficiando al kirchnerismo, cuando ella fue una de las principales hacedoras -junto con el radical Ernesto Sanz- de la alianza que le permitió a Mauricio Macri llegar a la Casa Rosada.
“Me sorprende la designación de Ferrari”
La presentación ocurrió el mismo día en que la gobernadora, lejos de ir contra la pesada herencia sciolista, ascendió al cargo de ministro de Justicia (en reemplazo de Carlos Mahiques) al ex Asesor General de Gobierno de Scioli (y, por efecto transitivo, de Vidal), Gustavo Ferrari, también Secretario General de Boca Juniors y que, tal como reveló Hoy, responde al presidente del club de la Ribera, Daniel Angelici. Junto a él, actuaba como una suerte de nexo con jueces y fiscales bonaerenses, en un tráfico de influencias en la Justicia que la propia Carrió le achacó a Angelici.
Tal como pudo saber nuestro diario, el nombramiento de Ferrari causó malestar entre los “lilitos” y anoche la propia Carrió lo expresó sin pelos en la lengua. “Tengo esperanza en el gobierno de Vidal, pero me sorprende la designación de Ferrari, tan ligado a Angelici”, afirmó. Por eso (mucho menos en política) no debe interpretarse como casual ni inocente que la denuncia de la aliada más incómoda de Cambiemos haya ocurrido en la misma fecha en el ex Asesor General de Gobierno fuera nombrado ministro.
La presentación puede ser leída por Vidal como una suerte de “ayuda memoria” recordatorio sobre los funcionarios sciolistas que continúan en su gestión y que Carrió advierte en su acusación al mencionar los negociados con la Lotería de la Provincia de Buenos Aires, cuyo vicepresidente es Jorge “Piedrita” Rodríguez (titular del Instituto de Lotería y Casinos en tiempos de Scioli); ABSA, que continúa bajo el gerenciamiento del Sindicato Obras Sanitarias de la Provincia de Buenos Aires (SOSBA) conducido por Julio Castro, profundizándose el vaciamiento de una empresa cuyo servicio ineficiente es motivo de constantes reclamos; y el IOMA, donde se mantiene el 70% de los integrantes del directorio que acompañó al sciolista Antonio La Scaleia (que aparece en los Panamá Papers), muchos de ellos denunciados penalmente por la comisión de graves delitos.
Con munición gruesa contra Prat-Gay
“Voy a hacer una cuestión de privilegio ante los dichos del ministro [de Hacienda, Alfonso]Prat-Gay”, criticó ayer la diputada Elisa Carrió, luego de que el funcionario saliera a pedirle perdón a los empresarios españoles por los “abusos” del kirchnerismo. Pero Carrió recordó que “hay una causa penal en trámite donde están imputados los integrantes del directorio de Repsol, la expresidenta y todos los miembros del bloque del Frente para la Victoria que votaron la expropiación, diciendo que se trataba de un acuerdo y que sólo había que fijar el precio”.
“[Antonio] Brufau fue elegido el mejor CEO de España por haber logrado más de lo que vale la compañía [YPF] por un vaciamiento acordado con Kirchner”, sentenció la jefa del bloque de la Coalición Cívica (CC) en el inicio de la sesión de ayer.