26/04/2016 - 06:05hs
El fiscal Carlos Stornelli quien interviene en el Caso Skanska le pidió al juez Sebastián Casanello que se anulen los sobreseimientos de los imputados en el que se conoció como el primer caso de corrupción del kirchnerismo. Hizo un planteo de "cosa juzgada írrita" para poder reabrir el caso.
En su presentación, el fiscal recordó la hipótesis del caso: "Que Skanska, en el marco de su participación en las obras públicas había pagado comisiones indebidas a funcionarios públicos, justificando contablemente la salda del dinero mediante la simulación de operaciones comerciales imputadas a aquellas obras."
"Que Skanska habría recurrido a la modalidad de simular operaciones o contrataciones imputadas a dichas obras públicas, con 23 sociedades comerciales de dudosa capacidad operativa, pagos estos que ascenderían a las sumas aproximadas de $5.766.900 por la ampliación del Gasoducto Sur y $1.795.200 por el tramo de la construcción del Gasoducto Norte".
"Aquella ilegal operatoria de Skanska,-reitero, supuestamente destinadas al pago de comisiones indebidas- se habría valida de simular operaciones comerciales con terceras sociedades que, según la distinta documentación contable incorporada como prueba, proveerían diversos servicios en el marco de las obras en cuestión y a las cuales se les abonaran las sumas de dinero relacionadas con dichas contrataciones, pero sin que estas procedieran a la efectiva prestación del servicio documentalmente asentado. Es decir Skanska habría pagado determinadas sumas de dinero en dichas sociedades-algunas de ellas de formal existencia pero sin actividad societaria y comercial real, otras reales pero de dudosa capacidad operativa- sin recibir contraprestación comprobable alguna"
Entre los procesados, y luego sobreseídos estaban Fulvio Madaro quien encabezaba el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) en el principio del kirchnerismo, quien estaba al frente de Nación Fideicomisos, Néstor Ulloa y quien fuera secretario de Energía, Daniel Cámeron. También fueron procesados y sobreseídos los ejecutivos de la filial argentina de la empresa sueca y de las firmas Transportadora de Gas del Sur y Transportadora de Gas del Norte que participaron de la construcción de dos gasoductos. Cuando comenzó el caso allá por 2007 el kirchnerismo habló de que había sido una "negociación entre privados".