Por el caso Ciccone, Ricardo Echegaray tuvo una extensa jornada en Comodoro Py

Ayer pasó por el banquillo de los acusados el extitular de la AFIP, quien declaró durante cuatro horas ante el juez Ariel Lijo en los Tribunales Federales. Intentó desligarse de tener un trato preferencial en el levantamiento de la quiebra de la imprenta, pero las pruebas en su contra complican su situación

El extitular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, declaró ayer durante cuatro horas frente al juez federal Ariel Lijo en los Tribunales de Comodoro Py, por la causa en la que se investiga el origen de los fondos que se utilizaron para la compra de la ex-Ciccone Calcográfica. El exfuncionario nacional negó haber otorgado facilidades de pago mientras conducía la AFIP, cuestionó la veracidad de un documento aportado en la causa por Alejandro Vandenbroele y pidió su sobreseimiento.

Echegaray fue citado a declarar debido a que estaba al frente del ente recaudador cuando la empresa consiguió un rápido plan de pagos. Se trata de lo que dio en llamarse Ciccone 2, causa referida a las operaciones financieras para acceder a la adquisición de la imprenta. Durante la indagatoria, cuando se le preguntó por el trámite administrativo del levantamiento de la quiebra de la firma, el cual se resolvió en 48 horas, Echegaray dijo que era el plazo establecido por la ley para una gestión que tenía el carácter de “muy urgente”. Según argumentó, los procedimientos administrativos podrían resolverse en cinco días si estaban catalogados como “normales”, en tres si eran “urgentes” y en dos si eran “muy urgentes”.

Por su parte, su abogado defensor, León Arslanián, indicó que en aquella oportunidad su defendido “se reunió con (Amado) Boudou, quien le manifestó su preocupación por la importancia de la impresión de papel moneda y la supervivencia de Ciccone”. “Nadie más habló con él sobre este tema”, declaró.

Una novedad de la jornada de ayer sucedió cuando se le exhibió al acusado un documento aportado por Vandenbroele ante la Justicia. El mismo, según el testigo “arrepentido”, circulaba en la AFIP durante la gestión de Echegaray a modo de garantía de que había aval político del gobierno kirchnerista para salvar a Ciccone de la quiebra.

Arslanián argumentó que dicho elemento “no tienen ningún valor jurídico porque es una simple fotocopia”. De acuerdo a lo expresado por el letrado defensor, ese documento “fue puramente oficioso, ni siquiera se incorporó al expediente, no se le dio curso”. “Es un uso indebido de un documento que no tenía ninguna capacidad resolutiva”, agregó. También detalló que el plan de pago determinado para Ciccone fue el regido por la Resolución 970, que no ofrece ninguna quita, es decir que se realizó una financiación de la deuda completa.

Aquel papel había sido entregado a Vandenbroele por Rafael Resnick Brenner, exjefe de Gabinete de la AFIP, quien declaró hace 15 días en el juicio por la causa Ciccone, señalando que en su área “no se movía un papel” sin que Echegaray lo supiese. “Todo el accionar que yo tuve como jefe de asesores era consensuado o instruido por el administrador federal”, fueron las palabras de Resnick Brenner.

La ingeniería financiera, bajo la lupa

En el mismo contexto fueron citados los banqueros Jorge Brito y Raúl Moneta. Brito presentó el lunes al magistrado un escrito de ocho carillas en el que negó haber financiado la compra de la imprenta Ciccone mientras cumplía funciones en el Banco Macro y dijo no conocer a José María Núñez Carmona ni a Vandenbroele. Con respecto a Boudou, indicó que lo conoció solamente “por cuestiones institucionales”.

En el caso de Moneta, el juez pidió que se certifique su situación de salud, ya que se encontraría en estado convaleciente por una larga enfermedad. Asimismo, se le ampliará la declaración indagatoria a Máximo Lanusse, exgerente administrativo del Banco Macro, quien entró a la ex-Ciccone junto con Vandenbroele. Lanusse fue vicepresidente de la empresa The Old Fund, que adquirió el 70% de las acciones de la imprenta.

También deberán declarar el abogado Francisco Sguera, vinculado a la misma entidad financiera, y Pablo Amato, yerno de Nicolás Ciccone, uno de los dueños de la imprenta. 

Sospechas que continúan abiertas

En los fundamentos del fiscal Ariel Lijo sobre las citaciones a Ricardo Echegaray, Jorge Brito, Raúl Moneta, Máximo Lanusse, Francisco Sguera y Pablo Amato, se señala que fueron requeridos “respecto de la participación que tuvieron en la maniobra por la cual Amado Boudou y José María Núñez Carmona adquirieron la empresa quebrada y monopólica Ciccone Calcográfica, mientras el primero era ministro de Economía, a través de la sociedad The Old Fund y de Alejandro Vandenbroele, con el fin último de contratar con el Estado nacional la impresión de billetes y documentación oficial”

Para el juez, “se encuentra reunido el estado de sospecha requerido por el Artículo 294 del Código Procesal Penal de la Nación”. El magistrado indicó que las declaraciones efectuadas por Alejandro Vandenbroele en el marco de un acuerdo de colaboración “corroboraron las hipótesis relacionadas con la procedencia de los fondos aplicados a la empresa The Old Fund y Ciccone Calcográfica”.

La acusación contra el extitular de la AFIP señala que se habría encargado de resolver en tiempo récord y de modo excepcional la situación de la imprenta, la cual tenía una deuda de 60 millones de dólares. La operación del ente recaudador incluyó el “levantamiento de la quiebra, la regularización fiscal y el gerenciamiento de la compañía o el financiamiento de la operatoria”.

La actividad será intensa en los Tribunales Federales

Esta semana continuará el desfile por Comodoro Py, en el marco de las causas vinculadas a los negocios del exvicepresidente de la Nación, Amado Boudou. Además de Amato, Lanusse y Sguera, quienes declararán hoy, mañana y pasado mañana, respectivamente, a partir de la próxima semana pasarán por los tribunales de Retiro los implicados en la investigación de lo que fue el primer negocio de la firma The Old Fund: una supuesta consultoría para que la provincia de Formosa renegociara la deuda que tenía con el Estado nacional. Aquella operación se concretó cuando Boudou era ministro de Economía. 

Por esa causa deberán comparecer el gobernador formoseño Gildo Insfrán (el lunes 4 de diciembre), la entonces ministra de Economía de Formosa, Inés Lotto de Vecchietti (martes 5 de diciembre), y un empleado de The Old Fund, Sergio Gustavo Martínez (miércoles 6 de diciembre).