03/05/2015 - 10:20hs
Un informe realizado por la consultora Economía & Regiones vaticina un segundo semestre con un aceleramiento inflacionario. La política monetaria expansiva, entre las causas centrales de este crecimiento
La inflación, se ha convertido en algo fundamental para la vida diaria de millones de argentinos, que sufren enormemente cada punto más que se tiene en el índice inflacionario, y que el gobierno se encarga de negar como un problema clave para las familias del país.
Un informe realizado por la consultora Economía & Regiones (E&R), indica que la inflación durante el segundo semestre del 2015 “se acelerará”, más que nada por la fuerte “política monetaria expansiva” que viene manteniendo el gobierno kirchnerista.
De acuerdo a este estudio, la inflación "se ubica en torno al 29%/30% interanual, pero probablemente se desacelerará hasta 25%/27% durante los próximos meses".
Según la consultora que dirige Alejandro Caldarelli, "en la segunda parte del año la inflación se acelerará porque la actual política monetaria expansiva de (el presidente del BCRA Alejandro) Vanoli, que aumentó la tasa de variación anual de la base monetaria de 17% a 32%, comenzará a tener impacto sobre precios".
El informe indica además que “también es muy probable que en la segunda parte del año el dólar cuasi fijo (debido al contexto regional) se deslice más pronunciadamente, lo que contribuirá a la aceleración de los precios".
"La política anti inflacionaria exige como pre-requisito la construcción de un índice de precios creíble y confiable; el régimen anti inflacionario que se adopte, ya sea metas monetarias o metas de inflación, requiere que el tipo de cambio deje de ser objetivo de política económica. Bajar la inflación es un pre requisito indispensable para generar ingreso de capitales, atraer inversión, ampliar el stock de capital, la frontera de posibilidades de producción y volver a generar crecimiento y empleo”, destaca E&R.
En estos tiempos, con números del Indec totalmente cuestionados, la inflación ha vuelto a ser uno de los problemas centrales para los argentinos, que temen una nueva estampida inflacionaria en el futuro cercano, que mine aún más las posibilidades de crecimiento de las familias argentinas.