04/09/2013 - 06:18hs
La planta de la petrolera todavía no se recupera del incendio que sufrió durante la trágica lluvia del 2 de abril. Aseguran que las condiciones de seguridad son deplorables
El peligro en la Refinería de YPF en Ensenada está al acecho, como cuando casi se desata una catástrofe durante las intensas lluvias del 2 de abril pasado. “Hoy podría volver a pasar lo mismo” coinciden los especialistas, ante la falta de prevención por posibles emergencias. El detonante en la trágica inundación había sido el desborde de una pileta que separa al petróleo del agua y el líquido llegó hasta el horno de Coke A, que trabaja a 500 grados centígrados, aunque por la lluvia se había apagado y a esa altura estaría entre los 200 y 300 grados, lo que ocasionó el incendio, según los relatos de ese momento.
A cinco meses de ese incidente y a pesar de que desde la empresa petrolera estatizada anunció la reapertura del horno de Coke A, trabajadores de la refinería de YPF aseguraron a Hoy que el nuevo equipamiento no está en condiciones de funcionar por un largo tiempo.
El principal problema es la falta de un plan de prevención y de personal capacitado ante las emergencias, según destacaron especialistas consultados por Hoy. El exsecretario de Combustibles, Gustavo Callejas, dijo a nuestro diario que “es necesario contratar obreros especializados para que la refinería funcione bien, para eso hay que retomar la formación del personal que se tenía antes de la privatización con la YPF estatal, no se puede seguir trabajando con gente contratada o de la Uocra”.
Según el titular del grupo Moreno “cada turno no puede tener menos de 40 personas y tiene que haber gente muy especializada en accidentes las 24 horas, pero no ahora no la hay porque fueron se suspendieron en la gestión de (José) Estenssoro”, durante el menemismo. En ese sentido, Callejas resaltó que “el grupo Moreno viene denunciando que no hay personal capacitado para resolver siniestros y que el mantenimiento es muy malo”.
El ambientalista Marcelo Martínez, de la ONG Nuevo Ambiente, aseguró a Hoy que en la refinería de YPF en Ensenada sigue habiendo “falta de control y continúan las emisiones gaseosas”. Además, alertó que “las piletas siguen funcionando con gran cantidad de hidrocarburos” y que la situación “sigue igual” que antes del incendio. “No hay ningún plan de contingencia con la población como existe en el polo petroquímico de Bahía Blanca”, refirió Martínez. Por lo que el ambientalista consideró que si hay una lluvia similar a la del 2 de abril “nuevamente puede ocurrir lo mismo”.
Para Callejas, aquel 2 de abril “si el canal oeste hubiera estado limpio se hubiera evacuado el agua y no se podría haber inundado nunca la refinería”. El ambientalista Martínez recordó que pidieron una auditoría al Organismo de Desarrollo Sostenible (Opds) de la Provincia por lo que no obtuvieron respuestas y que en caso de lluvias, los excedentes pluviales que están llenos de hiudrocarburos van a parar al canal este y siempre se encuentran productos en ese canal cuando limpian un tanque”.
Pérdidas en medio de la crisis energética
La refinería de YPF en Ensenada procesa el 30% del crudo que se utiliza para producir combustibles. La planta tiene una capacidad para procesar 28.500 metros cúbicos diarios de petróleo. Es por eso que el incendio durante el temporal del 2 de abril agravó la crisis energética que se vive en el país. A raíz de los destrozos que sufrieron las instalaciones de YPF en Ensenada, hubo que importar $ 400 millones en combustibles para atender la demanda de las estaciones de servicios de YPF.
Además, durante el segundo trimestre del año, de abril a junio, YPF reportó a la Bolsa de Comercio una caída del 35,8% en los beneficios comparado con el mismo período de 2012. La utilidad neta del período descendió hasta $ 535 millones, lo que representa $ 1,36 por acción. En 2012, las ventas habían sido de $ 833 millones, o $ 2,12 por acción.