16/03/2016 - 06:09hs
Patricio Masana fue indagado ayer por la fiscal Virginia Bravo. Sorprendió al afirmar que un 80 por ciento de las drogas que secuestraron en su casa estaban vencidas. Cuando le mostraron el video que lo muestra colaborando con los delincuentes, bajó la cabeza y no emitió palabra. Por ahora no involucró a jefes policiales
Patricio Miguel Masana, el subteniente de la Policía Bonaerense detenido y acusado de participar en el violento asalto que sufrió la familia del intendente Julio Garro el 2 de marzo pasado en el country Grand Bell, y que causó un revuelo político de magnitud, fue indagado ayer por la fiscal Virginia Bravo a la que le dijo que las drogas que encontraron en su casa estaban vencidas y que no tenían ningún poder toxicológico.
Además, Masana afirmó que las metanfetaminas y cocaína que secuestraron en su domicilio eran para consumo personal y no para la venta, y cuando le mostraron el video en el que se observa a los dos delincuentes que habían asaltado a la familia del intendente que se subían a su camioneta Mercedes Benz color negra, el policía exonerado bajó la cabeza y no emitió palabra. Un vocero judicial explicó que Masana le expresó a Bravo que la pistola calibre 22 Bersa serie 284998 con cargador con siete cartuchos con punta hueca que incautaron en su vivienda es un arma que tenía desde hace seis años y que nunca la había usado.
Al respecto, el detenido insistió para que los especialistas le hagan una pericia a la pistola y así confirmar que nunca había sido detonada. A la vez que solicitó que se examinen a las 187 pastillas de metanfetaminas y los 62 cristales de cocaína, incautados en su propiedad, con el objetivo de confirmar sus dichos respecto a que en un 80 por ciento estaban vencidas.
El abogado defensor de Masana, Alejandro Montone, en diálogo con Hoy, aclaró que “está probado que mi cliente sufrió en la cárcel síndrome de abstinencia, y si consideramos que solo algunas pastillas servían, deberían cambiar una de las carátulas”. Es que la fiscal acusó al expolicía de robo calificado, tenencia ilegal de arma de fuego y tenencia de estupefacientes para su comercialización.
Por tal razón, en éste último caso, para Montone el delito debería ser tenencia para consumo. Además el letrado se quejó porque en la indagatoria no le exhibieron en tiempo y forma los elementos secuestrados a su defendido.
Maniobras financieras en la mira
En tanto, sobre el hallazgo de planillas de las horas extras de policías en la casa de Masana, Montone explicó que “desde el 2013 Patricio cumplía funciones en la comisaría Primera como encargado de confeccionar los formularios de POLAD y de controlar que se realicen esas vigilancias en esa jurisdicción”.
Sin embargo, en este punto Masana “no prendió el ventilador”, ya que se presume que él formaba parte de un circuito de corrupción del que participaban varios jefes policiales, los que se habrían quedado con importantes sumas de dinero en forma mensual, y que explicaría el nivel de vida que llevaba.
Como se recordará el subteniente exonerado por el Ministerio de Seguridad, cobraba un sueldo de 18 mil pesos, y sin embargo alquilaba una finca en el Grand Bell con una renta de 40 mil pesos y pagaba 8000 pesos de honorarios, además de haber comprado una camioneta de alta gama, entre otros lujos.
La fiscal Virginia Bravo investiga además del robo en la casa de Garro, el presunto enriquecimiento ilícito de Masana y una posible asociación ilícita de integrantes de la fuerza policial.
Ayer, la magistrada le dijo a Hoy que esa causa avanza: “Estamos llevando adelante un paneo total de la situación. Analizamos recibos de sueldos, documentos, expedientes de pago de adicionales y luego concretaremos una pericia contable”.
Hay sospechas, por ahora solo eso, de que varios jefes policiales se quedaban con dinero destinado al pago de POLAD, y por eso la semana pasada la Dirección de Asuntos Internos dispuso el relevo del comisario Marcelo Cifuentes y del subcomisario Carlos Arias de la seccional Primera.
Cambiaron los titulares de tres comisarías
Tal como lo anticipó en exclusiva este diario, anoche se efectuaron los cambios en tres comisarías de La Plata, otro de los coletazos por el asalto a la familia del intendente Julio Garro.
Con el desplazamiento del titular de la comisaría Primera, Marcelo Cifuentes, se vieron afectadas varias seccionales. Por eso anoche Diego Galarza, quien era el titular de la Undécima (Ringuelet) se hizo cargo de la comisaría Primera.
El puesto que dejó vacante Galarza fue ocupado por Adrián Mosca, hasta ayer titular de la comisaría Quinta. Y en esta última seccional tomó el mando Marcelo Volpintesta, el que dejó de ser jefe de turno en la Distrital Oeste.
Anoche, fuentes oficiales, le confiaron a Hoy que “el que camina por la cuerda floja es el jefe de la Departamental de La Plata, Darío Camerini, quien está siendo investigado por Asuntos Internos por su presunta complicidad en algunas maniobras de malversación de fondos públicos”. Por lo tanto no descartan que en las próximas horas se definan más cambios.