13/08/2014 - 16:59hs
En medio de un clima enrarecido, con pico de inseguridad, que se dio con la muerte dolorosa de un niño de 14 años, y entre acusaciones severas (desde el Sindicato de la Carne catalogaron una gestión gubernamental “manchada con sangre”), finalmente el intendente Oscar Brasca pidió licencia por el término de 10 días.
El presidente del Ejecutivo fundamenta su solicitud ante el Concejo Deliberante por motivos personales, aunque ese órgano deberá avalar esta noche la petición del intendente. En caso que la misma sea aprobada, el secretario de Gobierno Alberto Pérez quedará al frente de la comuna.
Uno de los medios locales, describe estas horas y este gesto de Brasca como “un gesto más que da cuenta que la delincuencia y la inseguridad crece ante un gobierno ausente, con un intendente que no da la cara, que no afronta los problemas, que no se hace cargo, que se esconde…”
Los rumores sobre una posible renuncia del intendente son cada vez más fuertes.