11/05/2017 - 01:31hs
Con los datos inflacionarios de abril puestos sobre la mesa, que marcan un 1,1% por encima de lo previsto en la última paritaria, se asoma una nueva aplicación automática de la cláusula gatillo. Desde el gobierno preparan los números para avanzar con la suba salarial
Los números inflacionarios dados a conocer ayer por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) marcan un incremento en el nivel de precios que impacta de lleno en el salario de los trabajadores, que ven cómo la situación de la economía diaria los golpea.
A partir de la difusión de los datos oficiales, se puede desprender que los estatales de la Provincia de Buenos Aires recibirán un nuevo incremento en sus salarios a partir de la próxima aplicación de la denominada cláusula gatillo en el mes de junio, al haber sobrepasado la inflación el 1,5% mensual especificada en el acuerdo paritario entre la Provincia y los gremios de los empleados públicos encuadrados en la Ley 10.430.
El inédito convenio alcanzado a fines del año pasado por la administración de María Eugenia Vidal con los sindicatos más representativos del sector, como son los casos de Soeme, UPCN y la Federación de Gremios Estatales y Particulares de la Provincia de Buenos Aires (Fegeppba), contemplaba la actualización automática por inflación, lo que hace que los trabajadores reciban un nuevo beneficio a raíz del arreglo.
El acuerdo, que impulsó el ministro de Trabajo Marcelo Villegas, establecía un aumento salarial cuyo piso anual era del 18%, a pagarse en cuotas trimestrales del 4,5%. Ahora bien, producto de la aplicación de la cláusula gatillo que está atada a los indicadores del Indec, los estatales deberán recibir un 1,1% extra a partir del tercer trimestre.
De esta manera, el salario no pierde su poder adquisitivo, ya que sigue el mismo monto de la inflación, y al revés de lo que ocurre con el sector docente, que fruto de la disputa todavía no han logrado un acuerdo salarial, los estatales acceden a un beneficio en épocas económicas tan duras como las que se viven actualmente.
Certezas oficiales
Con el índice inflacionario sobre la mesa, desde el gobierno bonaerense comenzaron a trabajar para avanzar en la aplicación de la suba salarial correspondiente, y para que la misma pueda llevarse adelante lo más rápido posible, demostrando su capacidad política para cumplir con lo pautado.
Las autoridades remarcaron su intención de brindar “previsibilidad” para el empleado estatal, de allí el mecanismo de actualización automática de los salarios, por el cual, si la inflación es superior a la prevista en el acuerdo concertado, directamente se aumentan los salarios, no perdiendo el trabajador poder adquisitivo.
Desde el gobierno expresaron la certeza de que el dinero existe dentro de las arcas provinciales y que no habrá ninguna clase de problemas en su pago, ya que en el presupuesto planteado a comienzos de año se previeron situaciones como estas, destinándose los recursos necesarios para su financiamiento.
Como consecuencia de que la inflación de abril superó a la prevista originalmente, el piso anual del incremento salarial pasó al 20%, un registro que supera el 18% pautado en su momento entre el Estado y los gremios.
Sobre la escalada inflacionaria, el gobierno estima que en el segundo semestre el incremento en los precios va a ceder, una vez que se acomoden los valores tras el aumento en las tarifas de los servicios públicos, y de esta manera la inflación logrará ajustarse a las metas oficiales trazadas a principios de año.
Vale recordar que en el primer trimestre del año también se superó el 4,5% estipulado en el convenio, acumulando un alza del 6,29%, lo que llevó a que los estatales recibieran con el sueldo del mes en curso un incremento extra del 1,79%, compensando así la suba de los precios.