Laura Calampuca, la madre de Natalia Melmann

“Tengo temor de que maten a otras chicas”

Así lo afirmó ante este medio Laura Calampuca, la madre de Natalia Melmann, la joven de 15 años que fue violada y asesinada en 2001 en Miramar. Tres de los condenados ya fueron beneficiados con salidas transitorias

Natalia Melmann tenía 15 años cuando el 4 de febrero de 2001 fue a bailar a un boliche de Miramar. Cuatro días después, su cuerpo sin vida, golpeado y con signos de haber sufrido una violación, fue encontrado en el vivero municipal de esa localidad costera.

Por ese crimen fueron condenados un año más tarde tres policías: Oscar Echenique, Ricardo Anselmini y Ricardo Suárez, además del “entregador”, Gustavo Fernández, un exconvicto. El 20 de octubre los tres policías detenidos salieron de la cárcel de Batán y entre las 8 y las 20 estuvieron en sus casas, con sus familias. Dos de ellos estuvieron a menos de tres cuadras de Laura Calampuca, la madre de Natalia. La autorización judicial para que los asesinos de Natalia accedan a dos salidas transitorias el primer y tercer domingo de cada mes fue firmada por la Cámara de Apelaciones nº 2 de Mar del Plata, a cargo de Javier Mendoza y Esteban Viñas.

El beneficio otorgado levantó polvareda. La abogada de la familia Melmann ya presentó la reserva en Casación y en los próximos días agregará los fundamentos para apelar la medida excarcelatoria.

Luego de que los asesinos de su hija egresen del penal, Gustavo Melmann y Laura, los padres de Natalia, hablaron con diario Hoy y manifestaron su dolor, bronca y miedo por la medida avalada por la Justicia.

—¿Los magistrados han recibido informes que certifican que los presos están en condiciones de recibir beneficios excarcelatorios?

Gustavo Melmann:—Sí, pero la evaluación psiquiátrica que hicieron de ellos recomendó que no salgan de la cárcel. Además, nosotros vamos por la cuestión de fondo. Queremos la aplicación de la ley vigente desde el año 2000 que dice que por los delitos graves que cometieron deben cumplir su condena hasta 2027. No deberían poder salir, salen por criterios de los jueces. Los magistrados deben hacer cumplir la ley.

Laura Calampuca:—Yo estoy en contra de las salidas de la cárcel de Echenique, Anselmini y Suárez porque son asesinos y tienen una reclusión perpetua por tiempo indeterminado, más accesorias. Tienen que cumplir esa pena. La ley no permite ningún tipo de beneficios.

—¿Han tenido respaldo desde el gobierno bonaerense?

GM:—Sé que la gobernadora declaró que los presos no deberían salir. Voy a intentar comunicarme por teléfono con María Eugenia Vidal. Entiendo que a ella le ha tocado sufrir y por eso vive en una base militar. Gobernar la Provincia de Buenos Aires es convivir con sectores mafiosos de la Policía Bonaerense que manejan buena parte del delito.

—¿El crimen de Natalia provocó cambios en Miramar?

GM:—Sí, hubo cambios muy profundos en los primeros tiempos. Cuando se dictó la sentencia había más de 3.000 personas a las once de la noche en Miramar esperándonos. Algo nunca visto. Después, desde la defensa de los condenados hubo una campaña para desprestigiar el fallo judicial, a nuestra familia y a Natalia. Pero lo importante es que el mes pasado el Concejo Deliberante declaró personas no gratas a los condenados por el crimen de Natalia.

LC:—A partir del crimen de mi hija se creó una fiscalía en Miramar. Recuerdo que después de que removieron a todo el personal de la comisaría, transcurrieron dos años sin homicidios.

—¿Consideran que el Poder Judicial bonaerense necesita ser reformado?

GM:—Por supuesto. Hay que evaluar a los jueces de manera permanente. Ellos hablan por su fallos, entonces hay que analizar esas sentencias. El Consejo de la Magistratura debería tener representantes de ONG que aporten miradas distintas. Necesita tener una visión de género totalmente diferente. Tiene que haber un cambio.

LC:—Los jueces, en el año 2012, ya le habían dado salidas transitorias a los asesinos de Natalia. Yo no lo sabía y me encontré con Echenique en el supermercado. El tipo estaba comprando alcohol. Después de luchar bastante, le revocaron los beneficios.

—Laura, usted es la única del grupo familiar que vive en Miramar, ¿tiene miedo de que le pueda pasar algo?

LC:—Yo nunca les tuve miedo, pero sí tengo temor que maten a otras chicas como a Natalia. Estos tipos, antes de asesinar a mi hija, mataron a otras dos mujeres de la misma manera. Gozan con el dolor ajeno. Además de los tres detenidos tenemos dos asesinos sueltos. Uno de ellos, Ricardo Panadero, va a ir a juicio en mayo del año que viene. Al otro pertenece el ADN que se encontró en el cuerpo de Natalia hace 17 años y todavía no hicieron nada para identificarlo.

—¿Qué pasó con los hermanos de Natalia?

LC:—Mis hijos se fueron de Miramar, porque presentíamos que esto iba a pasar. En 2012 el hijo de Echenique amenazó a mi nieto de 5 años. Le puso un revólver en la cabeza y después gatilló tres veces, pero no tenía balas. Ese mismo tipo mató a otro joven en Miramar y lo condenaron a 18 años de cárcel.

—Laura, usted enfrentó a los jueces que beneficiaron a los expolicías. ¿Qué les dijo?

LC:—Les dije si pensaban llevárselos a su casa. Les pregunté: ¿se los van a llevar al barrio a donde viven ustedes?, ¿les van a dejar a sus nietos, sus hijos, sus sobrinos cerca? Me contestaron que tenía que desalojar la sala.

Detalles de la polémica morigeración

El juez de Ejecución Penal de Mar del Plata, Ricardo Perdichizzi, estableció cómo será el régimen de salida de los tres condenados por el crimen de Natalia Melmann, ocurrido en febrero de 2001.

De acuerdo al magistrado, quien rechazó los tres pedidos que luego fueron convalidados por la Cámara de Apelaciones con la firma de los jueces Javier Gustavo Mendoza y Esteban Ignacio Viñas, al momento de fijar las condiciones de las salidas, tanto Oscar Echenique como Ricardo Anselmini y Ricardo Suárez deberán permanecer en los domicilios declarados durante el período estipulado.

Los beneficios se concretarán el primer y tercer domingo de cada mes y los policías condenados por el brutal homicidio ocurrido en Miramar permanecerán fuera de la cárcel entre las 8 y las 20. Además de no poder abandonar sus casas, tienen prohibido tomar contacto con la familia de Melmann o sus allegados.

Al respecto, la abogada que representa a la familia de la víctima, Constanza Berisso, habló sobre el impacto de esta resolución judicial en el entorno de Natalia, teniendo en cuenta que dos de los policías residen a menos de tres cuadras de la propia familia. “Es una locura”, resumió la letrada.