23/08/2016 - 03:27hs
El exsecretario de Obras Públicas, José López, cuya detención por intentar ocultar casi US$ 9 millones en un convento de General Rodríguez puso en crisis a buena parte del andamiaje kirchnerista, enfrenta nuevas dificultades en el frente judicial, luego de que su exsecretario aportara detalles sobre el ostentoso nivel de vida del exfuncionario, agregando nuevas sospechas por enriquecimiento ilícito.
Ante el fiscal Federico Delgado, el hombre, que trabajó durante 40 años en el área de Ceremonial del Ministerio de Planificación y que en los últimos 12, antes de jubilarse, se desempeñó como secretario privado del segundo de Julio de Vido, aportó datos sobre cómo López se manejó entre 2003 y 2015 en la Secretaría.
El testigo aseguró que el estilo de vida de López no concordaba con el sueldo de un funcionario público y detalló regalos que recibía por parte de empresarios contratistas a los que debía controlar.
También contó que hacía trabajos personales para los López que se habrían pagado con fondos del Estado.
Fuentes judiciales señalaron que el testigo también aludió al uso de autos oficiales del Órgano de Control de Concesiones Viales (OCCOVI) por parte de la mujer y las hijas de López, y la contratación supuestamente desproporcionada de personal. Incluso advirtió que la esposa del exfuncionario, Ana María Díaz, usaba carteras Louis Vuitton.
Por otro lado, agregó que conoció al obispo Rubén di Monte en un acto oficial en la Basílica de Luján y que estaba al tanto de la existencia del Monasterio en el que López trató de esconder los bolsos de la corrupción.
El exempleado de López también le dijo al fiscal que sospecha de Germán Nivello, exsubsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda, que ahora se desempeña como subsecretario de Obras Públicas en Santa Cruz. “Su forma de vida y los autos que usa no tienen relación con lo que gana”, apuntó sobre Nivello, ya denunciado por el envío irregular de fondos millonarios a la agrupación Túpac Amaru que lidera la piquetera Milagro Sala.