Boudou: el viento, la arena y otra causa por corrupción
09/07/2014 - 03:03hs
Todo el arco opositor salió ayer a rechazar la presencia de Amado Boudou, hoy, en Tucumán, para encabezar el acto por el día de la Independencia. Los dirigentes destacaron que significa “un agravio, una humillación y una ofensa”, y pidieron al vicepresidente procesado que tenga “dignidad” y evite “presentarse en público.
El titular de la UCR, senador Ernesto Sanz, afirmó que "es un agravio a todos los argentinos" que el vicepresidente, procesado por la causa Ciccone, encabece el acto por la fecha patria, mientras que el socialista Hermes Binner señaló que la presencia de Boudou "tensa la cuerda". A través de un comunicado, Sanz opinó que el vicepresidente "no nos puede representar en ninguna fiesta patria, en ningún lugar del mundo y tampoco está en condiciones de presidir ninguna sesión en el Senado".
Por su parte, el diputado radical Miguel Bazze definió como "una grave falta de respeto del Gobierno al conjunto de la sociedad, que el vicepresidente procesado por la Justicia presida los actos del día de la Independencia" y consideró que Boudou "debería tener algo de dignidad personal y no presentarse en público".
"El Gobierno debiera tener una posición de condescendencia con lo que está ocurriendo. (Boudou) goza del beneficio de la Constitución y de la Ley en el sentido de que es inocente hasta que se demuestre lo contrario. Pero hoy está convocado por la Justicia, en vías de procesamiento", dijo a su vez Binner.
Las críticas, así, fueron unánimes. Finalmente, el diputado nacional por GEN, Omar Duclós, envió un mensaje a la Presidenta al advertir que "si se consuma lo anunciado, su decisión de enviar a Boudou a San Miguel de Tucumán a presidir el acto, significará una humillación y provocación al pueblo argentino y una ofensa a los héroes que lucharon por nuestra independencia".
“Un daño institucional enorme”
Tanto es el repudio que se ha ganado Amado Boudou, que el exjefe de Gabinete, Alberto Fernández, señaló ayer que el vicepresidente le genera al Gobierno "un daño institucional enorme", mientras que, al compararlo con Julio Cobos, dijo que el que le "pudo provocar" éste con su voto "no positivo" de la Resolución 125 "tuvo que ver más con un daño político de opinión".
"Lo de Boudou es algo de otra dimensión, un daño institucional enorme, ya que se lo está involucrando en un delito y se está cuestionando su moralidad pública", afirmó Fernández.