13/02/2014 - 14:17hs
El presidente del bloque de legisladores frentista, Pedro Pesatti, afirmó que “lo que dijo ayer la presidenta o lo tomamos en serio o luego será tarde para lamentarnos si no actuamos en consecuencia”.
“De nada sirve gritar a destiempo y este no es un momento para estar en silencio. En una convergencia de sectores financieros, monopolios relacionados a la exportación de materias primas, grandes cadenas de comercialización minorista y grupos mediáticos que actúan como los organizadores del discurso justificatorio de lo que pasa en el país con la escalada de los precios y la especulación salvaje, vemos hoy un armado de un nuevo poder de facto que no tiene botas ni usa gorra y, en consecuencia, es más sutil pues resulta complejo advertir de donde viene la conspiración que busca, como dijo la presidenta, hacer saltar por los aires el gobierno que nació de las urnas del pueblo”, remarcó en un comunicado.
Agregó: ”Desde una perspectiva histórica nadie puede desconocer que cuando el poder económico tuvo que defender sus intereses no dudó en apelar a cuanto medio tuviera a su alcance para debilitar y derrocar a los gobiernos democráticos, desde el golpe contra Yrigoyen -que desembocó luego en el vergonzoso pacto de las carnes con Inglaterra- al golpe del ´55 que buscó desarmar todos los avances en materia social que había logrado nuestro pueblo en los nueve años que duró la etapa del peronismo clásico”.
En una nota que se publica en la edición de ADN (Agencia Digital de Noticias), Pesatti amplía: “el Poder Judicial tiene la oportunidad histórica de enmendar, frente a estos intentos desestabilizadores del poder constitucional, su comportamiento durante el golpe de estado contra el presidente Yrigoyen y que habilitó luego cuanto golpe de estado se sucedió en la Argentina. Así como fue cómplice del primer quiebre constitucional del país en 1930, hoy el Poder Judicial tiene la oportunidad de ser quien le ponga freno a los especuladores que trabajan para desestabilizar el gobierno democrático”.
“Es más, el Poder Judicial debiera observar si las circunstancias ya no configuran faltas debidamente tipificadas en la ley de defensa de la democracia pues sólo un necio podría afirmar que la especulación que practican las grandes cadenas constituyen una práctica ingenua, desprovista de todo objetivo político y económico, motivo que ya mismo debiera ser objeto de investigación de la Justicia en tanto su primer deber es cuidar la observancia plena de la Constitución Nacional y el estado de derecho”.